La final de la Supercopa de España puede marcar un antes y un después en esta temporada. El primer título del curso estaba en juego y se tintó de blaugrana de manera incontestable después de que un Barça sublime asestara un 1-3 al Real Madrid. Fue tal el golpe culé  al orgullo merengue que, sin duda, de alguna manera u otra, el partido del pasado domingo repercutirá en los ánimos blancos de cara a las próximas citas.

No obstante, algunas voces ya apuntan hacia alguna posible consecuencia dentro del vestuario, ya que, si bien todo el Real Madrid estuvo muy flojo, varios jugadores quedaron retratados por su flojo rendimiento. En este sentido, se habla de que Carlo Ancelotti habría sido invitado a ver que Antonio Rüdiger no está a la altura de las circunstancias y que, no solo el lesionado Alaba, sino que hay otros recursos en la plantilla que pueden aportar más que él.

Robert Lewandowski y Antonio Rüdiger, luchando por una pelota durante el Real Madrid - Barça de Supercopa / Foto: EFE

Antonio Rüdiger, un partido para olvidar

Desde el minuto 1, ya se vio a un Rüdiger inseguro. La exuberancia física del central alemán lo suele hacer ganador de la mayoría de duelos, pero con balón, el ex del Chelsea estuvo francamente desacertado. Jugar a pierna cambiada en el eje de la zaga no le supone ninguna dificultad porque así fue como se consagró como uno de los mejores centrales de Europa jugando en Stamford Bridge.

No obstante, en el Clásico del domingo, presionarlo era una mina de oro para el Barça. El berlinés no solo tuvo errores técnicos, sino que algunas de sus tomas de decisiones fueron horribles y, además, descalibró la línea del fuera de juego del Real Madrid en más de una ocasión. Mucho se ha hablado en el Real Madrid del partido de Rüdiger por su debilidad, pero su figura queda todavía más en evidencia en vista de que Militao, su pareja en el eje de la defensa, fue uno de los pocos futbolistas merengues que mantuvo un buen nivel.

El brasileño protagonizó una batalla brutal con Robert Lewandowski. A campo abierto, jugando de espaldas o en el juego aéreo, polaco y brasileño se emparejaron repetidas veces, dejando la labor de Rüdiger con nota todavía más deficiente. Sin duda, un partido para olvidar.

Gavi, asistiendo Robert Lewandowski en el segundo gol de la final de la Supercopa / Foto: EFE

Nacho Fernández pide paso

Con David Alaba indispuesto, en el Real Madrid se extiende la preocupación por la exigencia del calendario que se le avecina. Los de Ancelotti tienen que volver al Estadio de la Cerámica, donde perdieron hace una semana, para después viajar hacia San Mamés, recibir a la Real Sociedad, y seguidamente, al Valencia. De cara a estos duros compromisos, la plantilla pide que sea Nacho Fernández quien regrese a la titularidad. Al entrar desde el banquillo en la final de la Supercopa, al menos, puso un poco de remedio a la fuga que el Real Madrid tenía en la defensa.