El AC Milan había mostrado un firme interés en la incorporación de Marcus Rashford para este mercado invernal, aprovechando que se encuentra en una situación muy delicada en el Manchester United. Ha dejado de entrar en los planes de Rubén Amorim, que no cuenta con él, y le ha demostrado una confianza muy escasa en sus habilidades, relegándolo a un discreto segundo plano. Y le ha enseñado la puerta de salida para este mes de enero.
Ya le ha trasladado que, si quiere jugar, lo mejor que puede hacer es cambiar de aires e iniciar un nuevo desafío en otro sitio, y le han colocado un precio de venta de 50 millones de euros, una cifra realmente asumible. Esto había provocado que los ‘rossoneri’ estuvieran dispuestos a apostar por él, y firmar a una nueva estrella procedente de la Premier League, como previamente hicieron con Christian Pulisic, Fikayo Tomori o Ruben Loftus-Cheek.
Pero es una operación que se ha complicado enormemente por dos motivos. El primero, porque la venta de Noah Okafor al RB Leipzig se ha acabado descartando, después de que no haya superado los pertinentes reconocimientos médicos, mientras que el internacional inglés tampoco se ha mostrado especialmente seducido con la idea de recalar en San Siro. Y es que hay un posible destino que le convence mucho más para dejar Old Trafford.
Se trata del Barça, que es el siguiente conjunto en el cual desea aterrizar Rashford. Se ha ofrecido personalmente a Joan Laporta y a Deco, y es consciente de que Hans-Dieter Flick ha pedido una cara nueva para la parcela ofensiva, donde no acaba de confiar ni en Pau Víctor, ni en Ferran Torres y Anssumane Fati. Y el entrenador alemán valora muy positivamente la contratación del crack de 27 años, que puede ocupar cualquier demarcación del ataque, y tiene una gran experiencia.
Da prioridad a su desembarco en el Camp Nou mucho antes que en Milán, y espera pacientemente una respuesta definitiva por parte de la directiva azulgrana.
Laporta y Deco no acaban de tener claro el fichaje de Rashford
Laporta y Deco no acaban de tener claro que merezca la pena apostar por el fichaje de Rashford, aunque ahora mismo sí que se podrían permitir esta inversión, después de haber entrado en la regla del 1:1. Y en especial, si consiguen ingresos con la venta de alguna estrella.
Así que, de momento, el Barça todavía no ha tomado una decisión definitiva con esta operación.