N’Golo Kanté llegó a ser considerado como un fichaje cerrado por el Barça. Joan Laporta y Mateu Alemany estaban convencidos de que era una incorporación increíble, considerando la experiencia y el nivel del jugador del Chelsea. Además, un factor importante era el hecho de que pudiera aterrizar sin ningún tipo de coste, al finalizar contrato en el mes de junio. Y eso provocó que comenzaran a tener contactos frecuentes y constantes.
Veían en el internacional francés a un relevo de completas garantías para Sergio Busquets, que sigue quedando libre al finalizar el curso, y por ahora no hay indicios de su renovación. Pero cuando se atrevían a poner fecha al comunicado oficial que anunciara la llegada del campeón del Mundial de Rusia, apareció la figura de Xavi Hernández, que fue quien se encargó de vetar todo, y de paralizar esta contratación, por varios motivos de peso.
Para empezar, tenía dudas de la adaptación del ex del Caen y del Leicester City al estilo de juego que practican en el Camp Nou. Como se ha podido ver con Franck Kessié, los futbolistas que destacan por su recorrido y el poderío físico que tienen sufren mucho para poder aclimatarse. Aparte, no le considera un pivote defensivo, y normalmente, en Stamford Bridge, siempre ha jugado como interior. No menos importante es el aspecto económico.
Si bien es cierto que Kanté podría llegar gratis, pediría un sueldo muy importante. Actualmente, en Londres percibe cerca de 12 millones de euros netos por campaña. Sin olvidar que ya está a punto de cumplir los 32 años, y, por lo tanto, no es una solución definitiva pensando en el futuro. El entrenador del Barça cree que los mejores días del centrocampista galo son cosa del pasado, y así se está comprobando este curso, en el cual prácticamente no ha podido jugar.
Por culpa de una lesión, no está disponible desde el lejano mes de agosto, perdiéndose el Mundial de Qatar. Y en las anteriores campañas, también ha acumulado muchos problemas físicos, en especial musculares.
Kanté, a punto de ampliar su vínculo
No obstante, esto no ha sido un impedimento para que Todd Boehly ofrezca un nuevo vínculo a Kanté. Aún es considerado una pieza importante por su influencia en el vestuario, y para la afición ‘blue’ es todo un ídolo.
Así que permanecerá en el Chelsea, independientemente de los malos resultados que están obteniendo, y que complica la presencia en la próxima edición de la Champions League.