Jürgen Klopp estaba convencido de que la próxima temporada podría disponer en el Liverpool de Toni Kroos, un jugador por el cual ha suspirado en varias ocasiones. El centrocampista alemán, que en enero cumplirá 32 años, está perdiendo peso en el Real Madrid, lo que le llevó a plantearse una salida. Y la misma duda surgía dentro del propio club, pues la intención es rejuvenecer un centro del campo que con el tiempo ha ido perdiendo frescura.
Al final, sin embargo, Toni Kroos ha decidido seguir en el Real Madrid, club en el que quiere colgar las botas. "Estoy seguro de que me retiraré en el Real Madrid, quizás en 2023", afirmó hace unas semanas. El gesto ha sido muy bien recibido por el Madrid, pues Kroos aceptará el rol que se le asigne en el equipo, aportando su calidad cuando el entrenador lo considere necesario.
Kroos, un fichaje de gran rendimiento
Fichado del Bayern de Múnich el verano del 2014 por solo 25 millones de euros, lo que fijaba su cláusula de rescisión, Toni Kroos se ha convertido en uno de los fichajes más rentables de los últimos tiempos del Real Madrid. Junto a Casemiro y Modric ha formado un centro del campo espléndido, mostrando una espectacular capacidad para dar pases milimétricos a grandes distancias.
Acumula ya 328 partidos con la camiseta del Real Madrid y 14 títulos, entre los que destacan 3 Champions League y 2 Ligas españolas. Como sucedió el verano pasado con Modric, Florentino Pérez cree que Kroos merece irse del Real Madrid cuando el jugador considere, por lo que no dudará en hacerle un contrato a medida, siempre y cuando el futbolista acepte una adecuación salarial.
Goretzka, un plan frustrado por el Bayern
Florentino Pérez intentó esta temporada repetir el caso Toni Kroos con otro centrocampista de nivel del Bayern de Múnich, Leon Goretzka. El centrocampista alemán, un fijo en las alineaciones del Bayern de Múnich de Nagelsmann, terminaba contrato el próximo 30 de junio, lo que provocó que el Real Madrid se interesara por su situación, al verle como un sustituto ideal de Kroos.
Al final, el Bayern salió victorioso del envite, pues Goretzka decidió rechazar la oferta del Real Madrid y firmar un nuevo contrato con el club bávaro que prácticamente le garantiza jugar los mejores años de su vida en el gigante bávaro. A diferencia de lo que ocurrió en el 2014 con Kroos, el Madrid se quedó con la miel en los labios.