Al Barça se le está acabando la paciencia con Jordi Alba. El lateral, capitán del primer equipo, no se ha tomado nada bien su nueva situación en el equipo, en el que ha pasado de ser el amo y señor de la banda izquierda a ser la tercera opción para Xavi Hernández, por detrás de Marcos Alonso y Alejandro Balde. A pesar de que Alba sabía que tendría competencia y de los avisos de que lo mejor para todos es que cambiara de aires, el entorno del jugador filtró estar muy molesto con el Barça, por haber negociado supuestamente con el Inter de Milán a sus espaldas, un enfado que poco después no tardó en verbalizar, en un acto publicitario.
"A mí me gusta ir de cara y que me vayan de cara. En este mundo del fútbol ya no me sorprende nada. Mi pensamiento siempre ha sido estar en el Barça, porque me veo capacitado para estar aquí los años que me quedan de contrato. Creo que siempre he mostrado mi compromiso. Pero las decisiones del club son las que son y nunca me voy a meter en ese tema", afirmó Jordi Alba. "Llevo muchos años en el club y también he pasado por momentos en los que no he jugado. Ahora no he tenido esos minutos, pero he intentado animar al grupo en todo lo que he podido. El ambiente es extraordinario", añadió.
Alba carga contra el club
Las declaraciones de Jordi Alba, en un momento en el que el equipo está jugando muy bien y en la previa del partido contra el Bayern de Múnich, sentaron como una bomba en el club, donde ya hay los que piensan que el lateral izquierdo está anteponiendo su caso al Barça, algo inaceptable para un capitán del primer equipo. Además de insinuar que el Barça no fue de cara con él, cuando Jordi Alba fue informado de las conversaciones con el Inter de Milán, el futbolista también ha dejado claro que piensa cumplir el contrato que tiene firmado, juegue o no, un órdago en toda regla.
A todo ello se añade la disputa que ya tuvieron hace unos meses el Barça y Jordi Alba por la rebaja salarial de los capitanes. En un momento delicadísimo, el club pidió cooperación a los cuatro capitanes, pero la respuesta inicial no fue la misma. Alba entendió que el Barça estaba filtrando informaciones sobre el tema y no dudó en salir al paso públicamente. "Lo que tenga que hablar con el club lo hablaré en persona. Tampoco se debe enterar nadie. No hay que dudar del compromiso de los capitanes, sabemos la situación que atraviesa el club. No puedo controlar lo que no está a mi alcance ni lo que diga la prensa", afirmó Alba.
Jordi Alba, en la rampa de salida
En estas circunstancias, el Barça empieza a pensar que Jordi Alba perjudica más que ayuda. Xavi Hernández considera que con Marcos Alonso y Alejandro Balde tiene cubierta la posición, por lo que Jordi Alba es prescindible, y más si decide crear mal ambiente en público. Además, su salario es muy elevado, una carga enorme de un jugador suplente.
Jordi Alba, pues, está sentenciado. Lo sabía cuando rechazó fichar por el Inter de Milán y lo sabe ahora. En el Barça solo esperan que Xavi Hernández gestione lo mejor posible el caso, teniendo en cuenta su relación con el jugador y que Jordi Alba acabe aceptando que lo mejor para todas las partes sería un cambio de aires.