Moussa Sissoko, agente de Ousmane Dembélé, es consciente de que tiene un enorme poder en sus manos. Sabe que el Barça necesita que Dembélé renueve para poder inscribir a Ferran Torres e intentar otro fichaje en este mercado de invierno. Lo que no había previsto es que el Barça no aceptaría chantajes y buscaría otras opciones, hasta el punto de dar por rotas las negociaciones.
Es por ello que mientras el agente filtra supuestas ofertas de Juventus y PSG, tanto Barça como Dembélé han decidido darse una nueva oportunidad, una última reunión, prevista para este mismo lunes, en la que se tomará la decisión definitiva. O hay acuerdo o el extremo francés saldrá traspasado este mismo invierno, a no ser que quiera estar toda la segunda parte de la temporada en la grada.
Xavi no pierde la esperanza
Uno de los más sorprendidos por toda la situación es Xavi Hernández. El entrenador del Barça, que apostó con firmeza en su misma presentación, cuando pidió públicamente que el club hiciera un esfuerzo, daba por hecha la continuidad de Dembélé. Es más, según afirma el diario As, entrenador y jugador pactaron la renovación en una conversación que acabó con un apretón de manos.
"No estoy decepcionado con Dembélé. Es una negociación. Tenemos una postura clara. Está en proceso. No se ha terminado. Soy optimista en que Dembélé haga un esfuerzo aunque los agentes no lo entienden. Él quiere hacer el esfuerzo", afirmó Xavi en la rueda de prensa previa al partido contra el Mallorca. Para Xavi, pues, la culpa recae en Moussa Sissoko, agente de Dembélé, que habría convencido al jugador de cambiar de aires.
Renovación, traspaso o grada
Mientras tanto, en el Barça la postura es clara. Se quiere la renovación de Dembélé porque es prioritaria para Xavi Hernández, pero las condiciones son las que son, pues ni el club puede hacer un esfuerzo económico ni el jugador lo merece tras el poco agradecimiento mostrado. Si Dembélé firma y rinde, en un futuro tendrá premio.
En el caso de seguir enrocado, Dembélé saldrá este mismo mercado de invierno, aunque en el Barça saben que como mucho podrán sacar 10 millones de euros, ya que entre prima de fichaje y salario ningún club va a pagar más por un fichaje que llegaría gratis en junio. Si Dembélé se niega a renovar y a salir traspasado tendrá que irse a la grada, pues el Barça no lo piensa promocionar. Todo se decidirá este mismo lunes en una reunión de final impredecible, como todo lo que rodea a Dembélé.