Esperpento de la RFEF y de La 1 de RTVE. Ante las amenazas de la Federación de Fútbol de Kosovo de no disputar el partido contra España si no se respetaban sus símbolos, como la bandera y el himno, desde el gobierno español se aseguró que no habría impedimentos, pues se trataba simplemente de un partido de fútbol. Lo que no dijeron es que usarían todas las triquiñuelas posibles para faltar a su palabra.

Y es que las banderas de España y de Kosovo han sido substituidas en el videomarcador del estadio de La Cartuja de Sevilla por los escudos de ambas federaciones. El himno de Kosovo, en cambio, sí que ha sonado por megafonía y se ha podido escuchar en directo por televisión, a pesar de los rumores que decían que podrían desconectar e ir a publicidad. Eso sí, la presentación ha sido "los himnos del partido", cuando lo habitual es presentar los himnos por separado, anunciando al país que representan.

Esperpéntico: España en mayúsculas y Kosovo en minúsculas

Y el ridículo no ha terminado aquí, pues al comenzar el partido ha aparecido "el golpe maestro" de un ridículo mayúsculo. En el marcador televisivo España se ha acortado como ESP, en mayúsculas, mientras que Kosovo se ha quedado en kos, en minúsculas. "Y cuando piensas que la 'democracia homologada' ya no puede caer más bajo, va y pone 'kos' en minúscula y 'ESP' en mayúscula, como si eso demostrara que 'kos' no existe. El ridículo internacional no puede ser más grande. #KosovoExiste #KosovoEsUnaNación", ha escrito el economista Xavier Sala-i-Martin.

Captura donde se aprecia como RTVE ha optado por nombrar a España en mayúsculas y a Kosovo en minúsculas / La 1

Y después, como ya se había ido informando a lo largo de este miércoles, se ha decidido no nombrar a Kosovo en ningún momento como Kosovo. Son dignos de elogio los enormes esfuerzos de Juan Carlos Rivero, el comentarista del partido, para no referirse a Kosovo como Kosovo, sino como "Federación de Fútbol de Kosovo", "selección kosovar", "combinado kosovar", "equipo kosovar" o, a ser posible, como "nuestro rival" o "rival de España".

Algunos estarán muy orgullosos de la acumulación de gestos ridículos que han llevado a cabo la RFEF y RTVE para recordar que España no reconoce a Kosovo. Lo cierto es que, a ojos del mundo, da la sensación de que España ha perdido mucho más de lo que ha podido ganar.

 

Imagen principal: momento en el que el himno de Kosovo suena por la megafonía del estadio de La Cartuja de Sevilla / Europa Press