En los últimos años cuesta mucho que salgan futbolistas con gran proyección de la Masia y que puedan consolidarse en el primer equipo. Ansu Fati o Carles Pérez han sido los últimos en mostrar esperanzas a los culés, pero son delanteros. Y de futbolistas del medio del campo al estilo Xavi, Iniesta o Busquets, con ADN Barça, han sido bien pocos los que han sacado la cabeza. Sin embargo, el último gran nombre en hacerse notar ha sido Riqui Puig, que vistas las pocas oportunidades que tiene con el primer equipo, se plantea dejar el Barça.
No es la primera vez que Riqui Puig, el cerebro del Barça B, avisa al club que quiere progresar en el primer equipo. En Segunda División B, con el filial blaugrana, cada semana sufre porque lo cosen a patadas. Su calidad y destreza con la pelota le permiten zafarse de muchas jugadas y, sin embargo, sigue marcando las diferencias en una categoría que se le ha quedado pequeña.
Con la promesa de tener minutos con el primer equipo esta temporada, se quedó en el filial, pero de momento Ernesto Valverde no confía en él. Vistas las perspectivas, igual que pasó hace unos meses en el inicio de curso, ha avisado al club: "No cierro la puerta a salir este invierno, no, pero es verdad que me gustaría tener más minutos arriba (primer equip). Hay muchos jugadores y me está costando tener estos minutos, y si no los tengo pues tendré que tomar alguna decisión".
Riqui, que también ha constatado que esta temporada no está entrenando tanto como el año pasado con el primer equipo, ha pedido coger experiencia. Y la solución que encuentra es hacerlo al lado de Messi y compañía, o probar suerte en otro club. El Barça tendría que ser claro y apostar por él. El futuro es suyo.