Desde el Real Madrid aseguran que han efectuado el mercado de fichajes que querían desde el Santiago Bernabéu. A pesar de la gran cantidad de salidas que se han materializado: Karim Benzema, Marco Asensio, Eden Hazard, Mariano Diaz, Jesús Vallejo o Álvaro Odriozola, entre otros canteranos, Florentino Pérez solo ha fichado futbolistas que podían ser entendidos como complementos.
A excepción de Jude Bellingham, el fichaje galáctico de este año para Carlo Ancelotti, el resto de caras nuevas ha llegado para complementar la plantilla. Así pues, hombres como Brahim Díaz o Joselu Mato han llegado para dar descanso a los teóricos titulares. Fran García es la única incógnita y, de momento, está aprovechando la lesión de Ferland Mendy para ganarse la confianza del técnico de Reggiolo.
El Real Madrid se deja deberes para 2024
No obstante, las palabras de Florentino no tranquilizan a la afición madridista, que cree que la plantilla está escasa de efectivos de calidad. Sobre todo en un ataque donde, tras la salida de Benzema, solo cuenta con Vinicius Júnior y Rodrygo Goes como grandes estrellas, y ninguno de ellos es un goleador nato.
Desde Valdebebas, parece, han dejado los deberes para el 2024, con la llegada de un Kylian Mbappé que podría aterrizar gratis en la capital. El francés es el gran anhelo del presidente capitalino, y el culebrón podría finalizar el verano que viene.
Sin embargo, la situación con el ataque del Real Madrid no se resolvería únicamente con la llegada del de Bondy. Joselu Mato no tiene el nivel suficiente para tener un peso importante en el equipo, y los blancos necesitan un '9' goleador.
Mbappé y Sesko, los verdugos de Rodrygo
Florentino se lanzará a por el fichaje de un delantero que promedie los goles que registraba Karim Benzema, ya que, como se ha visto hasta la fecha, Bellingham está llevando el peso goleador del equipo. Pero, esa no es su función.
La llegada de Mbappé, y la de un nuevo referente, pone sobre aviso a un Rodrygo que podría ver peligrar su futuro en el Santiago Bernabéu. El brasileño no ha adquirido la condición de estrella que se le presuponía y no ha acabado de explotar. El extremo termina su relación contractual en 2025, y Florentino deberá decidir si renovarlo al alza y tener un suplente de lujo en el banquillo, o venderlo a la Premier League, donde cuenta con un gran cartel.
Más allá del francés, Benjamin Sesko puede ser el verdugo de Rodrygo. Florentino es consciente que necesita renovar el tridente, con un delantero con mucha proyección como es el esloveno, y que promedie un gran registro goleador.