Roger Federer ha anunciado a través de sus redes sociales que pone punto y final a su brillante carrera en el tenis. El suizo, a sus 41 años, lo dejará con 20 Grand Slams en su palmarés y con el eterno reconocimiento de varias generaciones que lo han idolatrado por su saber estar, su clase, y por su juego. Un juego que no sólo ha sido una pieza artística por su belleza, sino que ha ido acompañado de una infinidad de victorias que han resultado en un total de 103 títulos en el circuito del ATP.
Roger Federer se retira con un palmarés casi inigualable
Además, también se colgó la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Londres el año 2012, cinco trofeos de la Copa Masters (actual ATP Finales), una Copa Davis con su país y tres Copas Hopman. Un palmarés prácticamente irrepetible y que habría sido todavía más extenso si no se hubieran interpuesto en su camino dos leyendas más como Rafa Nadal y Novak Djokovic.
Los tres, con la presencia inestimable de Andy Murray durante un buen puñado de años, han protagonizado unas de las rivalidades más épicas, pero más sanas, de toda la historia del deporte. Los tres se han ido alternando los títulos y la presencia en el sitio más alto del ranking de la ATP, que Federer llegó a ocupar durante 310 semanas, y 237 de forma consecutiva, siendo el jugador que lo ha hecho durante más tiempo. Su adiós supondrá un antes y un después para un deporte que siempre estará en deuda con él.
Ha luchado contra las lesiones los últimos tres años
"Tengo 41 años. He jugado más de 1.500 partidos durante más de 24 años. El tenis me ha tratado más generosamente de lo que nunca habría soñado y ahora tengo que reconocer que es el momento de acabar con mi carrera competitiva", empieza diciendo el suizo en la publicación. Asegura que, a pesar de las lesiones y las cirugías de los últimos tres años, ha luchado por poder volver a estar en forma, pero que su cuerpo "le ha enviado un mensaje muy claro". Ha querido agradecer a su mujer Mirka y a sus hijos, además del resto de la familia, entrenadores, patrocinadores, y todos los aficionados, además de sus rivales.
"He tenido la suerte de jugar muchos partidos épicos que no olvidaré. Nos hemos enfrentado de forma limpia, con pasión e intensidad. Nos hemos motivado los unos a los otros y juntos hemos llevado el tenis a otro nivel. Los últimos 24 años en el circuito han sido una aventura increíble. He tenido la fortuna de jugar en 40 países. He reído y llorado, he sentido alegría y dolor, pero sobre todo me he sentido increíblemente vivo", ha destacado Federer. Por último, el mayor agradecimiento, por descontado, a quien se lo ha dado todo. "Para acabar, al juego del tenis: te amo y nunca te abandonaré", ha finalizado.
Su última aparición como tenista será para la disputa de la Laver Cup, que enfrenta a los tenistas de Europa contra un equipo del resto del mundo. Este trofeo se jugará entre el 23 y el 25 de septiembre en el monumental recinto del O2 de Londres, que tendrá el honor de acoger el final de una de las carreras más admiradas de toda la historia del deporte.