Ronald Araujo es considerado como uno de los mejores centrales del planeta, y para muchos está en el top 1, por delante de otras estrellas como Virgil Van Dijk, Rubén Dias o Eder Militao. Lo cierto es que la influencia que tiene en el Barça es increíble, y cuesta encontrar a otro defensa que sea tan importante en su equipo. Es una de las pocas herencias positivas que dejó la etapa de Ronald Koeman, ya que fue él quien lo consolidó como titular indiscutible.
Poca gente podía esperar que el uruguayo se acabara consolidando en el primer equipo cuando llegó al filial, procedente de su país natal, como una apuesta de futuro. Josep María Bartomeu hizo caso a las recomendaciones de los ojeadores culés que hay repartidos por toda Sudamérica, e hizo una apuesta importante por un central que comenzaba a destacar pese a su juventud, aprovechándose del increíble poderío físico y la envergadura que tiene.
Y el resto ya es historia. A pesar de que a priori no encaja con el estilo de juego que se practica en el Camp Nou, y sufre bastante a la hora de tener que sacar la pelota controlada, es un fijo para Xavi Hernández, y no tiene sustituto posible. No es necesario dar muchas explicaciones del porqué, ya que es decisivo prácticamente en cada partido, con acciones defensivas espectaculares. Su simple presencia proporciona una sensación de solidez y de seguridad que no tiene precio.
Tan solo tiene 24 años, pero ya es uno de los líderes del Barça, y por ese motivo Joan Laporta y Mateu Alemany se apresuraron a renovarle el año anterior. No obstante, todavía no han podido registrar su nuevo contrato, debido a que sobrepasarían la masa salarial que permite LaLiga. Eso quiere decir que Araujo todavía es uno de los peores pagados de la plantilla, con una ficha inferior a los 500.000 euros netos anuales. Y de esto se quieren aprovechar muchos equipos.
Si no encuentran una solución a este problema, el ex de Boston River puede acabar marchándose, una baja muy sensible, y tiene múltiples llamadas.
El Chelsea le pone un cheque en blanco a Araujo
El Chelsea es uno de los admiradores de Araujo, y para convencerle, Todd Boehly le pone un cheque en blanco sobre la mesa. Puede pagarle absolutamente todo lo que pida, y espera convencerle para que traicione el Barça y a Xavi. No obstante, el ‘4’ ha dejado bien claras sus prioridades.
Y su sueño es triunfar vistiendo de azulgrana, así que tendrá toda la paciencia que sea necesaria. Pero Laporta y Alemany no se pueden despistar…