El paso de Ronald Koeman por el banquillo del Barça no fue una etapa exitosa para el club. El neerlandés asumió el cargo de entrenador tras la ridícula derrota por 2-8 contra el Bayern de Munich, que se llevó por delante a Quique Setién. Josep Maria Bartomeu creyó que lo mejor para el club era un entrenador que contara con el respeto de la plantilla y la afición por su pasado como jugador, y llamó al héroe de la primera Copa de Europa barcelonista para que aceptara el encargo de intentar levantar a un equipo hundido.
La relación de Ronald Koeman y Joan Laporta sigue siendo tensa
Pero se demostró que no era el perfil para hacerlo, y la relación entre Koeman y el Barça se fue desgastando, hasta llegar a un punto de no retorno, ya con Joan Laporta en la presidencia. Laporta nunca confió en él, y en verano de 2022 le comunicó al neerlandés que le diera unas semanas para buscar entrenador, pero no lo encontró, sobretodo por las limitaciones económicas, y Koeman empezó la temporada, aunque su confianza con Laporta era mínima.
Duró hasta el mes de noviembre y tras un inicio nefasto de temporada, tanto en liga como en Champions League, Laporta lo acabó echando para fichar a Xavi Hernández. Desde su salida del club, no se ha prodigado mucho en sus apariciones públicas, pero siempre que le han puesto un micrófono delante, no se ha mordido la lengua. La última muestra de ello la dio en un acto de la Fundación Cruyff en los Países Bajos donde asistió Jordi Cruyff, actual director deportivo del Barça.
Laporta no quiso a Wijnaldum en el Barça y se lo regaló al PSG
Koeman fue preguntado por el verano de 2021, y por el caso de un jugador local, Georginio Wijnaldum. El centrocampista neerlandés acababa en 2021 su contrato con el Liverpool, y Koeman, que lo conocía bien tras coincidir en la selección oranje, le pidió a Joan Laporta que intentara el fichaje, algo que no sucedió porque "el presidente quería jugar conmigo más que conseguir el jugador", ha sorprendido Koeman. El Barça lo tenía hecho, pero Laporta no lo quiso y se acabó marchando gratis al PSG de la mano de Nasser Al-Khelaïfi.
Su única temporada en Francia fue muy mala, y este verano ha recalado en la Roma, donde solo ha podido jugar 12 minutos en Serie A antes de romperse la tibia, en una mala suerte enorme, porque de la mano de Mourinho podía relanzar su carrera. Quizá en el Barça habría sido distinto, pero el fútbol ficción es solo eso, fantasía. Lo cierto es que Joan Laporta no tuvo mucho tacto cuando le dijo que no lo quería como entrenador porque, cuando no pudo fichar a un técnico, la credibilidad de Koeman era nula. El que será seleccionador de los Países Bajos después del Mundial de Qatar sigue sin olvidarlo, y siempre que puede aprovecha para mandar algún dardo con dirección al presidente barcelonista,