Sandro Rosell ya se moja en clave electoral. Un año después de ser absuelto de la acusación de blanqueo de comisiones, el expresidente del Barça ha concedido una entrevista a Mundo Deportivo en la cual habla de los veintiún meses de que pasó en prisión de manera preventiva, de Ronaldinho y Leo Messi y también de las elecciones a la presidencia del club blaugrana que se celebrarán el verano del 2021.
"Sigo las elecciones con mucho interés. Sólo deseo que ningún candidato represente a los intereses mediáticos o económicos que siempre han querido controlar el club para facturar y ganar dinero, tal como ha pasado en alguna etapa pasada", ha dicho.
Rosell, quien presidió el Barça entre los años 2010 y 2014, ha anunciado que "cuando sea el momento y si los socios quieren escuchar", denunciará abiertamente qué candidatos representan a los intereses mediáticos. Sobre Josep Maria Bartomeu, se ha limitado a decir que "es más fuerte de lo que la gente se piensa".
A la pregunta sobre qué perfil debe tener el presidente blaugrana, Rosell afirma que este tiene que ser "honesto, independiente de los intereses externos, futbolero y apolítico mientras sea presidente".
Él, sin embargo, descarta presentarse: "Hay que saber pasar página y no eternizarse en los cargos", dice.
Ataca a un sector de la prensa
Rosell, por otra parte, ha criticado a los periodistas que han calificado a la junta directiva de Bartomeu de rosellista, una etiqueta que el propio Bartomeu nunca ha rehusado. "Hay periodistas poco profesionales que desinforman y no contrastan. Barto ha tomado decisiones él solo. Si yo hubiera tenido influencia, por ejemplo, habría intentado que mi amigo Silvio Elias continuara en la junta. Lamentablemente no me sorprende que este sector de la prensa diga eso. Todos ellos 'casualmente' con el mismo mensaje, coordinado por alguien superior, y en todos los medios que siempre han ido a la contra, desde el 2010 hasta ahora. Muchos de ellos, medios que con nuestra llegada a la presidencia perdieron privilegios", ha sentenciado