Sandro Rosell sigue en prisión preventiva sin fianza. El expresidente del Barça ya hace casi seis meses que está privado de libertad, acusado de quedarse 6,5 millones de euros de la venta de los derechos audiovisuales de 24 partidos de la selección brasileña de fútbol. Un hecho que para Pau Molins, abogado de Rosell, es una "perversión del sistema y un abuso de la prisión preventiva".
Molins, en una entrevista en Rac1, ha criticado la medida que dictó en su día la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela, y ha denunciado el agravio comparativo: "Lo máximo son dos años de prisión preventiva, pero en este caso la medida es absolutamente desproporcionada y totalmente injusta. Esto no pasa en ningún sitio. Lo explicas en el extranjero y no lo entienden. Y si lo comparas con otros casos, tampoco lo entienden".
El abogado también ha señalado otros casos recientes donde Rosell ahora no estaría en la prisión. "En el caso Palau hubo un debate social cuando el juez puso en libertad a Millet a petición de la defensa, pero aquello era normal. En Estados Unidos, Madoff no estuvo ni un minuto en la prisión y era la mayor estafa de la historia. Si lo comparamos con el caso Villar, él estuvo seis semanas en prisión y Rosell lleva seis meses".
La defensa de Rosell, que ya ha reclamado cinco veces su libertad sin éxito, también relaciona el caso con el de los consellers encarcelados. "Lo excepcional es lo que pasa con Rosell y los exconsellers catalanes. La disparidad de criterios dice muy poco de la justicia", ha asegurado Molins antes de hacer referencia a Ignació González, expresidente de la Comunidad de Madrid, acusado por malversación de dinero público: "Siete meses en prisión y sale con una fianza de 300.000 euros".
Molins va más allá y afirma que "no hay explicación jurídica para que Rosell esté en prisión. Tiene que haber un motivo oculto que no sale en la resoluciones para que esté detenido, sospecho presiones de otros países, como Estados Unidos, que estarán molestos por haber perdido el Mundial en favor de Qatar". Por último, la defensa del expresidente del Barça ha criticado la lentitud de la justicia, personificada en Lamela: "La investigación empezó hace dos años, pero en los últimos seis meses la jueza no ha hecho nada, no ha iniciado ningún diligencia, sólo una declaración".