El exvicepresidente institucional del Barça Emili Rousaud ha concedido este jueves una entrevista a la Agencia EFE en la cual admite que, después de asegurar que alguien del club "había puesto la mano en la caja", su situación personal se le fue de las manos.
"Cuando me observé desde fuera, vi que no estaba proyectando como soy. A mí no me gustan las estridencias, soy una persona discreta y trabajadora. Se me fue de las manos", asegura. "No fue culpa de la prensa, fue culpa mía. Reconozco que me equivoqué, lo hice porque quiro el club", añade.
Rousaud pasó de ser un actor secundario a un auténtico protagonista el pasado 10 de abril, cuando, después de dimitir por las presiones de Josep Maria Bartomeu, insinuó en una entrevista en RAC1 que alguien se había enriquecido fraudulentamente gracias a la trama del 'BarçaGate'. Por este motivo, poco después el club anunció que emprendería acciones legales contra el exdirectivo.
"Ya está todo dicho, no se puede actualizar nada más. Ahora hay que esperar el resultado de la auditoría encargada por la junta en PriceWaterHouseCoopers", dice.
Rousaud, sin embargo, ahora defiende que en ningún caso acusaba a la junta directiva de corrupción. "Los que nos hemos marchado (seis directivos) somos la gente que sabemos que ha habido una irregularidad para esconder el contrato (de I3 Ventures) a la junta. No culpemos a la junta porque no sabía nada. No la puedo culpar, yo estaba y no sabíamos nada", asegura.
Hay que recordar Rousaud confirmó que el club pagó un precio fuera de mercado por la contratación de I3 Ventures y que, además, fraccionó la factura con el fin de evitar la comisión de adjudicaciones, de la cual él formaba parte.