Gane o pierda, la figura de Luis Enrique Martínez ya siempre será muy controvertida. Ya lo era antes de hacerse streamer con su discutida lista para viajar hacia el Mundial de Qatar 2022. Varios futbolistas con mucho renombre dentro del fútbol español como lo son Iago Aspas o Sergio Ramos no figuraban, mientras que otros hombres más discutidos, pero que forman parte de los ideales del seleccionador, sí que estaban.
La polémica estaba servida y los medios de comunicación echaban humo, ya que, además, las ya típicas contestaciones del asturiano en las ruedas de prensa lo situaban como el objetivo principal de las críticas. Con todo, el hecho de que haya querido unirse al grupo de los creadores de contenido en la plataforma Twitch todavía hace que su nombre sea más criticado.
¿Pueden los streams de Luis Enrique sustituir a las ruedas de prensa?
Las contestaciones del exentrenador del Barça a los periodistas no son el único "problema", ya que, aparte de sus preferencias futbolísticas, se habla mucho también del posible cambio de paradigma que puede estar creando el técnico de manera indirecta.
Luis Enrique ha confirmado en varias ocasiones que participa en Twitch por pura diversión y que lo hace para facilitar una opinión más cercana desde dentro de la selección hacia la afición. Durante su primer stream, aclaró que en ningún momento pretendía sustituir el trabajo de los periodistas, ya que son los propios viewers los que le hacen las preguntas y él responde a modo de rueda de prensa. Así pues, el hecho de que comparezca a través de la pantalla no deja de ser más leña al fuego con respecto al odio hacia su figura.
Rubiales sucumbe a la presión social y estudia sustituir a Luis Enrique
No son pocas las ganas de algunos de que haya un cambio de nombre en el banquillo de la Roja y, por esta razón, Luis Rubiales, presidente de la RFEF, estaría estudiando sustituir a Luis Enrique por un viejo conocido del fútbol español. Se trata de Marcelino García Toral, exentrenador de equipos como Valencia, Villarreal o Athletic Club de Bilbao que, aparte de liberar la alta tensión que cierne sobre la figura del actual entrenador de la selección absoluta, es un hombre que practica un fútbol con unas ideas totalmente diferentes a las de Luis Enrique.
Una decisión que, aunque todavía está lejos, está sobre la mesa. Tanto es así, que algunas informaciones apuntaban a que Marcelino habría rechazado ocupar la plaza que actualmente ostenta Quique Setién en el banquillo 'groguet' para esperar la oportunidad de Rubiales que, independientemente del resultado, se produciría después del Mundial.