La aclimatación de Antonio Rüdiger al Real Madrid no está siendo tan rápida ni sencilla como muchos esperaban que fuera. Entre ellos, un Carlo Ancelotti que no lo dudó a la hora de recomendar su fichaje, pues estaba convencido de que era una apuesta segura, y que merecía la pena hacer un esfuerzo por él, pagando todo lo que exigía. Era una oportunidad de mercado, y no podían desaprovechar que podía aterrizar totalmente gratis.

Hasta el momento, el ex del Chelsea, el Borussia Dortmund, el VFB Stuttgart y la AS Roma está teniendo muchos problemas para consolidarse como titular, y ha tenido que conformarse con un papel secundario. Únicamente está siendo utilizado como miembro en las rotaciones del equipo, y su rendimiento está bastante lejos del que mostró en sus últimos años en la Premier League, cuando se ganó el reconocimiento de ser considerado uno de los mejores del planeta.

El primero que está teniendo dudas sobre si tomaron la decisión correcta a la hora de firmar al defensa alemán es Florentino Pérez. Había muchas alternativas para la posición de central, si bien la insistencia de ‘Carletto’ y el hecho de que llegara con la carta de libertad provocaron que el presidente se decantara por hacer caso a las recomendaciones del entrenador. Por ello espera que las cosas cambien realmente pronto.

Y ahora se ha conocido que Rüdiger no fue la opción que más convencía en el Santiago Bernabéu para apuntalar la retaguardia. Había otros futbolistas que tenían informes mucho más favorables, si bien su precio era considerablemente más elevado. Entre ellos, estaba un Milan Skriniar al cual los ojeadores siguen desde hace muchos años, sin embargo, el Inter de Milán no estaba dispuesto a permitir la salida de una de sus grandes estrellas.

Eso provocó que se quedara en el Giusseppe Meazza, de donde puede irse muy pronto, pues no extenderá su vínculo, y cambiará de aires sin dejar ni un solo euro en las arcas.

Skriniar, vinculado con el Paris Saint-Germain

El Madrid no fue el único pretendiente de Skriniar, ya que también el Paris Saint-Germain hizo todo lo posible para sacarlo de Italia. Nasser Al-Khelaïfi se obsesionó con él, y llegó a ofrecer más de 50 millones de euros, una oferta que los ‘neroazzurri’ tumbaron de forma instantánea.

El eslovaco ya no tiene espacio en los planes de Ancelotti, y todo hace indicar que acabará aterrizando en el Parque de los Príncipes, sin descartar que lo haga en el próximo mes de enero.