El futuro de Mohamed Salah está generando un intenso debate en el mundo del fútbol. El crack egipcio, que sigue brillando con el Liverpool, termina contrato este verano y, sorprendentemente, el conjunto de Anfield todavía no ha movido ficha para ofrecerle una renovación. A pesar de ser uno de los pilares del equipo bajo la dirección de Arne Slot, la incertidumbre alrededor de su continuidad se incrementa con cada semana que pasa.
Durante meses, todo apuntaba a que Salah podría dar el salto al fútbol saudí, sumándose a una lista de grandes estrellas que han optado por los petrodólares en esta fase de sus carreras. Sin embargo, el egipcio, que está atravesando un momento espectacular en lo físico y lo futbolístico, está valorando la opción de seguir compitiendo al más alto nivel en Europa.
Entre los clubes europeos interesados, uno destaca por encima del resto: el Inter de Milán. El conjunto italiano ha puesto sus ojos en Salah como la pieza clave para elevar aún más su competitividad tanto en la Serie A como en la Champions League. Los directivos del Inter sueñan con un ataque formado por Salah y Lautaro Martínez, una dupla que promete ser letal y que podría consolidar al equipo como uno de los más temibles del continente.
Para Salah, esta opción resulta especialmente atractiva. El egipcio ya tuvo una etapa exitosa en Italia durante sus años en la Roma, donde demostró ser un jugador de élite antes de dar el salto al Liverpool. Regresar al fútbol italiano, pero ahora en un grande como el Inter, sería una forma de cerrar el círculo y volver a un escenario donde siempre fue valorado.
La situación deja al Liverpool en una posición complicada. Por un lado, perder a Salah sería un golpe durísimo, tanto en lo deportivo como en lo emocional, ya que el egipcio es uno de los ídolos más grandes de la afición en los últimos años. Por otro lado, el club está atravesando un periodo de reconstrucción bajo la dirección de Slot, y quizás estén valorando redistribuir los recursos en otras áreas de la plantilla.
Lo que parece claro es que la decisión está cada vez más cerca. Salah tendrá que valorar si cierra su etapa en Inglaterra para buscar un nuevo reto en Europa o si, finalmente, opta por un destino exótico como Arabia Saudí. Mientras tanto, el Inter de Milán permanece atento, dispuesto a aprovechar la oportunidad para hacerse con uno de los jugadores más determinantes del fútbol mundial.