Ansu Fati, una de las grandes promesas del FC Barcelona, está viendo cómo su futuro en el club se vuelve cada vez más incierto. A pesar de los esfuerzos de la directiva por encontrarle un destino, su historial de lesiones y su elevado salario dificultan cualquier movimiento. Tras el rechazo al Sevilla semanas atrás, ahora ha sido el Real Betis quien habría descartado su incorporación, argumentando dudas sobre su estado físico.

Bajo las órdenes de Hansi Flick, Ansu apenas ha tenido protagonismo esta temporada. Con solo cuatro partidos disputados en LaLiga, el técnico alemán no lo considera en forma para competir con los titulares habituales, como Robert Lewandowski, Dani Olmo, Raphinha y el joven prodigio Lamine Yamal.

Ansu Fati Europa Press

Un lastre físico y económico

El principal problema de Ansu Fati sigue siendo su estado físico. Desde su grave lesión de rodilla en 2020, el canterano nunca ha podido recuperar el nivel que lo llevó a ser considerado el sucesor natural de Leo Messi. Las continuas molestias y la falta de confianza han mermado su rendimiento, lo que, combinado con su alto salario, lo convierte en una apuesta arriesgada para cualquier equipo interesado.

El Real Betis, que parecía ser el destino más probable, ha dado un paso atrás tras analizar el estado físico del delantero. La delicada situación económica de los verdiblancos tampoco ayuda, ya que incluso una cesión con parte del salario asumido por el Barça representaría un esfuerzo considerable para el club andaluz.

Ansu Fati

Un futuro cada vez más complicado

El Barça, por su parte, necesita aligerar su masa salarial para cumplir con las exigencias de la Liga y continuar reforzando la plantilla. La salida de Ansu Fati era vista como una de las operaciones clave para liberar espacio, pero su situación actual lo convierte en un jugador difícil de colocar.

Con pocos minutos en el equipo y un mercado de invierno que se acerca rápidamente, las opciones para el canterano parecen limitarse. El club podría intentar buscar destinos en ligas menos exigentes, como la portuguesa o la turca, donde varios equipos han mostrado interés en jóvenes talentos con proyección. Sin embargo, la falta de continuidad y confianza del jugador podría seguir siendo un obstáculo.

La incertidumbre rodea el futuro de Ansu Fati, quien sigue luchando por reencontrarse con su mejor versión. Si el Barça no logra encontrarle un nuevo destino, su presencia en el equipo seguirá siendo un problema tanto deportivo como financiero.