El FC Barcelona sigue explorando opciones para reforzar su delantera de cara a la próxima temporada. Con la continuidad de Robert Lewandowski asegurada hasta 2026, el club busca un delantero joven con proyección que pueda aprender del polaco durante un año y asumir su relevo a largo plazo.
En este contexto, ha surgido un nombre que ha llamado la atención en los despachos azulgranas: Benjamin Sesko. El delantero esloveno de 21 años, actualmente en el RB Leipzig, se ha ofrecido al Barça como una opción de presente y futuro.
Sesko, un delantero con el perfil que gusta a Flick
Sesko es un delantero que encaja perfectamente en la idea de juego de Hansi Flick. Su 1,95 m de altura, su capacidad para jugar de espaldas y su movilidad lo convierten en un atacante muy completo. Pese a su envergadura, no es un delantero estático, sino que se mueve con agilidad, tiene buen juego aéreo y una gran zancada para atacar espacios.
Flick conoce bien el fútbol alemán y sabe de su potencial. De hecho, el técnico del Barça ha seguido su progresión desde que Sesko jugaba en el Red Bull Salzburg, donde deslumbró con su facilidad para marcar goles antes de dar el salto a la Bundesliga.
Una operación de 60 millones
El RB Leipzig no dejará salir fácilmente a su delantero, que tiene contrato hasta 2028. La cláusula de rescisión de Sesko ronda los 60 millones de euros, una cifra elevada para la situación económica del Barça, pero que no se descarta si se dan algunas ventas importantes en verano.
En el Barça valoran la posibilidad de hacer un esfuerzo por un delantero que puede marcar una época en el club. La intención de Sesko de vestir de azulgrana y su disposición a competir con Lewandowski durante una temporada juegan a favor de la operación.
El Barça lo estudia, pero necesita ventas
Antes de lanzarse a por el fichaje, Deco y la dirección deportiva deben cerrar salidas que permitan al club hacer una gran inversión en la delantera. Jugadores como Ferran Torres o incluso Frenkie de Jong podrían ser traspasados si llega una oferta importante, lo que daría margen para acometer la llegada de Sesko.
En cualquier caso, el interés del delantero es real y su llegada no es imposible, aunque dependerá de cómo se mueva el mercado en los próximos meses. Lo que está claro es que Sesko quiere jugar en el Barça y Flick ve con buenos ojos su fichaje. Ahora, la pelota está en el tejado de Laporta y Deco, que tendrán que decidir si hacen un esfuerzo económico para traer al delantero que está llamado a ser el heredero de Lewandowski en el Camp Nou.