El FC Barcelona se prepara para visitar al Celta de Vigo este sábado en Balaídos, en el regreso del fútbol de clubes tras el parón internacional. El conjunto dirigido por Hansi Flick afronta el partido con una ausencia sensible: Lamine Yamal, la joya de 17 años, no estará disponible debido a una lesión que le impedirá participar en el encuentro. Ante esta baja, se abren interrogantes sobre quién ocupará su puesto en el ataque, y ya hay un nombre que ha levantado la mano: Pau Víctor.
El delantero, que llegó este verano al Barça procedente del Girona a cambio de 3 millones de euros, está decidido a aprovechar la oportunidad. A pesar de haber tenido un inicio de temporada con pocas apariciones, su rendimiento en la pretemporada no pasó desapercibido, siendo uno de los jugadores más destacados en los amistosos veraniegos. Sin embargo, las grandes actuaciones de Lamine Yamal y el alto nivel competitivo del equipo lo relegaron a un rol secundario. Ahora, con la baja del joven prodigio, Pau Víctor ve su momento y no ha dudado en expresárselo al técnico alemán.
‘Estoy listo’, es el mensaje que, según fuentes cercanas al vestuario, el atacante habría transmitido a Flick en los últimos entrenamientos. La ambición de Pau Víctor no sorprende. Desde su llegada, el delantero ha mostrado una gran actitud, adaptándose rápidamente al estilo de juego del equipo. Sus características como atacante versátil, capaz de moverse con soltura por todo el frente ofensivo, encajan con las necesidades del Barça, especialmente en partidos como el de Vigo, donde se espera un Celta compacto y difícil de romper.
No obstante, la decisión final recae en Hansi Flick, quien todavía evalúa las opciones disponibles. Además de Pau Víctor, el técnico podría optar por otros jugadores como Fermín López, que ya ha desempeñado ese rol en ocasiones anteriores, o incluso apostar por cambios tácticos que redistribuyan las responsabilidades ofensivas.
El partido ante el Celta de Vigo será una prueba importante para el equipo, que busca mantener su racha positiva y seguir en lo alto de la clasificación. La ausencia de Lamine Yamal supone un reto, pero también abre una oportunidad para que otros jugadores den un paso al frente.
Para Pau Víctor, este podría ser el punto de inflexión que ha estado esperando desde su llegada. Con la confianza de su técnico y una buena actuación en Balaídos, podría consolidarse como una opción fiable en la rotación y demostrar que tiene nivel para competir por un puesto en el ataque azulgrana. Hansi Flick tiene la última palabra, y el sábado por la noche se sabrá si el delantero ha logrado convencerlo.