En el último partido del Real Madrid en la Liga Santander, los jugadores de Carlo Ancelotti consiguieron imponerse por 3-0 al Alavés. A priori, era un partido de trámite. El equipo se enfrentaba en el Santiago Bernabéu contra el penúltimo clasificado, pero el entrenador italiano no quiso hacer muchos inventos en la alineación.

Escogió el once de gala, excepto Toni Kroos, a quien quiso dar descanso. En su lugar, jugó Fede Valverde, que fue el único de los suplentes que pudo disputar una cantidad de minutos razonable, en su caso, el partido completo. También tuvieron minutos Marcelo Vieira, Eden Hazard, Rodrygo Goes, Lucas Vázquez y Dani Ceballos para otorgar descanso a sus arquetipos en el once inicial. Eso si, las cinco sustituciones se produjeron a partir del minuto 82, cuando el marcador ya era de 2-0 a favor de los locales.

Fede Valverde Madrid Alaves Europa Press

Fede Valverde, sobre el césped del Santiago Bernabéu / EFE

Dani Ceballos, dueño de los minutos de sobrante

El primero de los cambios de Ancelotti fue Dani Ceballos. El mediocampista de Utrera entró en lugar de Luka Modric, y una vez más, saltó al césped cuando su equipo ya no se jugaba nada. El andaluz ha mostrado su descontento con esta situación, que de añadida, se repitió incluso en el campo del Alcoyano en la Copa del Rey. Hay que recordar que, contra el Alcoyano, el dorsal 19 manifestó su desacuerdo con la decisión de Carletto de hacerlo ingresar en el campo cuando quedaban cinco minutos de partido.

Ceballos le dio la espalda y le levantó el brazo, una inconfundible falta de respeto por la que Carlo Ancelotti fue preguntado al acabar el partido: "Creo que eso no es un tema deportivo, es social, han cambiado las generaciones. El respeto que yo tenía a mi padre no es lo mismo que el que me tiene mi hijo. Ahora no hay tanto con respecto a la autoridad".

Dani Ceballos banquillo Real Madrid EuropaPress

Dani Ceballos, sentado en el banquillo del estadio Martínez Valero / Europa Press

Dani Ceballos pide a gritos salir del Real Madrid

A sus 25 años, Dani Ceballos pasó dos temporadas cedido en el Arsenal, donde pudo demostrar, aunque de manera intermitente, que es un futbolista carismático y con mucha calidad. Cuándo podía brillar, no se escondía, pedía el balón y no rehuía al contacto físico que solía atraer cuando lo retenía. Pasa en la Premier League, pero cuando jugaba en el Betis, también quería ser protagonista. En cada partido dejaba una recopilación de muchos de sus recursos individuales y asociativos.

Vestido de blanco, se siente atrapado. Pide a gritos salir del Real Madrid. Frente al Alavés, volvió a jugar los minutos de sobrante. Sin embargo, no dudó en atreverse a probar cosas arriesgadas. Sea como sea, está crucificado dentro del club. Tiene contrato hasta 2023, por lo cual su traspaso no será muy cuantioso y es un jugador accesible en el mercado. El Betis está interesado y el jugador estaría encantado de volver a la que fue su casa durante muchos años.

 

Imagen principal: Carlo Ancelotti, serio / EFE