Uno de los grandes talentos del Barça se ha comenzado a plantear muy seriamente sus opciones de futuro, y no descarta en absoluto acabar cambiando de aires cuando finalice la temporada, para recalar en otro equipo donde pueda tener más oportunidades. Porque Hans-Dieter Flick le prometió durante el anterior verano que podría hacer su debut profesional, y que sería un habitual en los entrenamientos, y también, en prácticamente todas las convocatorias.
Y esto provocó que Guille Fernández optara por rechazar a todos sus pretendientes, y firmar su primer contrato profesional en el Camp Nou. Tenía una cantidad de ofertas espectacular, que le mejoraban considerablemente el sueldo, pero en ningún momento tuvo dudas, y quiso quedarse en el club de su vida, al cual ingresó siendo un niño. El problema es que no se han cumplido las promesas que le hicieron Joan Laporta y el entrenador alemán.
Es cierto que ha tenido un rol muy protagonista en el filial, compitiendo en Primera RFEF, donde ya pudo estrenarse el curso anterior. Pero esto no es suficiente para el centrocampista nacido en el año 2008, que esperaba poder cumplir su sueño, y tener minutos en La Liga EA Sports o en la Copa del Rey, irrumpiendo en la élite a pesar de su juventud, como previamente hicieron Lamine Yamal o Pau Cubarsí, y también Anssumane Fati o Pablo Paéz ‘Gavi’.
Sin embargo, la increíble competencia que existe en el centro del campo ha provocado que se tenga que conformar con jugar con el Barça Atlétic. Y es una situación que no ha gustado en absoluto al internacional español en categorías inferiores, que ya ha demostrado que está preparado para dar el salto, como reflejan sus estadísticas con el filial, anotando un total de cinco goles, además de repartir una asistencia, pese a jugar como mediocentro.
Guille, además, está preocupado por la posible llegada de un nuevo crack para la medular, que acabaría por cerrarle las puertas, y ya han aparecido clubes muy interesados en su contratación, como el Borussia Dortmund, el Paris Saint-Germain, el RB Leipzig, el Oporto o el PSV Eindhoven.
Guille, con envidia de su primo
Guille no puede ocultar que tiene envidia de su primo, Toni Fernández, que es de su misma edad, tan solo tienen un mes de diferencia, y que sí ha podido estrenarse con el Barça, a pesar de haber completado una campaña más discreta por culpa de las lesiones.
El riesgo de perder a una de las grandes joyas de La Masía es muy grande…