El Barça necesitaba a sus grandes estrellas en plena forma para medirse al Inter de Milán, un partido decisivo para conseguir la clasificación a octavos de final de la Champions League. Pero la realidad es que todo el equipo firmó una actuación decepcionante, y eso provocó que muchos jugadores quedaran señalados después de la derrota. Por ejemplo, Robert Lewandowski, que pasó completamente desapercibido, si bien no pueden echar la culpa al polaco.

Y es que prácticamente no dispuso de ocasiones, pues no le llegaron balones. En cambio, quien sí merece ser duramente criticado por su actuación es Ousmane Dembélé, que volvió a recordar a ese futbolista impreciso, irregular y errático. Pese a que Xavi Hernández había conseguido recuperar su mejor versión, todavía debe de lograr que el internacional francés sea decisivo en este tipo de partidos, una tarea que tiene pendiente.

Ousmane Dembélé/ Foto: EFE

Igual que sucedió frente al Bayern de Múnich, ‘el Mosquito’ perdió una gran cantidad de pelotas. No se puede decir que no lo intentara, y cada vez que entraba en juego generaba peligro, pero no tuvo ninguna jugada decente. Muchos de sus centros pasaron completamente de largo, sin encontrar rematador, y tampoco disparó a portería. Con actuaciones así, es lógico que muchos se pregunten si realmente es una estrella de clase mundial.

Y es que no se le puede negar su velocidad, su habilidad con el balón y su regate, pero eso no es suficiente. Para poder ser colocado a la altura de otros como Kylian Mbappé, Vinicius Junior, Mohamed Salah, Sadio Mané y compañía, también tiene que ayudar a su equipo con goles. Eso es lo que esperan en el Camp Nou, donde no hay que olvidar que pagaron casi 150 millones de euros en su momento por el campeón del Mundial de Rusia.

Joan Laporta y Mateu Alemany dudaban de que Dembélé llegue a ser un crack capaz de resolver partidos por sí solo, pero Xavi lo tenía claro. Ahora es momento de cuestionarse quien tenía razón…

Dembélé pone en aprietos al Barça

Además, el ex del Borussia Dortmund y del Stade Rennais está poniendo en aprietos al Barça, y puede protagonizar una traición muy dolorosa. Porque después de la renovación de su contrato, incluyó una cláusula de rescisión de únicamente 50 millones de euros, de los cuales él se llevaría la mitad. Es decir, que los culés solo recibirían 25 ‘kilos’.

Y ya se ha hablado de negociaciones entre Dembélé y algunos equipos ‘top’, como por ejemplo el Bayern, el Liverpool, o en especial, el Paris Saint-Germain. Su pérdida sería muy dolorosa para Xavi.