La chaqueta verde que ya se había puesto tiempo atrás Severiano Ballesteros o José Maria Olazábal la ha vestido otro jugador español, Sergio García. El golfista valenciano consiguió ayer su primer Grand Slam al imponerse a Justin Rose en el primer agujero del play off. El jugador mediterráneo consigue la gesta 37 años después de que lo hiciera por primera vez el mítico Ballesteros, que ayer hubiese cumplido 60 años.
'El Niño' le ganó la partida a un Rose muy sólido en el último día de torneo, que llegó a aventajar al español por 2 golpes en el hoyo 13. La buena evolución en el juego del sudafricano y los peores momentos del valenciano sobre el campo hacían prever que el desenlace sería el de siempre: un Sergio García quedándose a las puertas de un major otra vez.
Sergio Garcia lo había tenido a tocar más de una vez. En el año 2007 perdió el play off ante Padraig Harrington en el Open Británico, mientras que en el 2014 también estuvo muy cerca de conseguirlo en el mismo torneo, pero acabó alzándose el joven Rory McIlroy. También rozó la victoria en los PGA de los años 1999, plantando cara a un Tiger Woods que reinaba en el mundo del golf, y el 2008, que volvió a ganar Harrington.
Pero en esta ocasión todo ha cambiado. El National Augusta fue testigo de otro español vistiendo la chaqueta verde, tal como un día lo hicieron también Ballesteros i Olazábal hace décadas. Si no pudo estar en las anteriores ediciones de 2002, 2004 o 2013, acabando entre los diez primeros clasificados, ayer domingo cumplió el sueño de todo golfista y entró en el Olimpo del deporte.
A pesar de acabar ganando en el primer agujero de desempate, lo tuvo muy cerca en el 18, fallando el putt que le hubiera hecho firmar una tarjeta con -10. Pero la suerte le volvió a apoyar minutos después, en el play off, embocando el golpe final y consiguiendo el birdie que premia su regularidad en los últimos años.
Promesa a la vista
Jon Rahm, un joven vasco de sólo 22 años, participó en el campeonato norteamericano y finalizó 27º. A pesar de no haber tenido una buena actuación en el último día de torneo, resolvió con solvencia los primeros días en Augusta y llegó el domingo a seis golpes de su compatriota, que encabezaba la clasificación. Jon Rahm es profesional desde hace poco más de un año y ya ha pisado el mítico campo de Georgia.