Sergio Ramos afronta su segunda temporada en el PSG. En su primer curso, más marcado por las lesiones que por otra cosa, estuvo casi desaparecido, y se llegó a especular con que podría llegar a abandonar el conjunto parisino este mismo verano. No obstante, el andaluz parece otro. Ya recuperado de sus problemas físicos, con la llegada de Christophe Galtier al banquillo del Parque de los Príncipes, el exfutbolista del Real Madrid ha empezado a mostrar lo que todo el mundo del fútbol ha visto en los últimos 15 años, pero en una posición donde no está demasiado acostumbrado a actuar.
Ramos se reinventa en el PSG de Galtier
Porque el nuevo técnico del París Saint-Germain ha viajado a la capital con su libreto y sus ideas, y las está empezando a implementar. La más evidente hace referencia al dibujo que implementa sobre el terreno de juego: un 1-3-4-3 muy característico. En esa línea de tres centrales, Ramos parece que es el dueño del central derecho, acompañado de Marquinhos por el centro, y Presnel Kimpembe por la izquierda. Por supuesto, la posición de defensa central no es nada ajena para él, que aunque surgió del Sevilla como lateral derecho, y de hecho fue Campeón del Mundo con España en esa posición, ha desarrollado toda la última década en el eje de la defensa.
No obstante, en el Real Madrid casi siempre jugó como central por la izquierda, con Varane o Pepe en la derecha, y siempre con defensa de cuatro. Ahora, con 5 y por la derecha, puede estar más protegido, tanto por un lateral rapidísimo como Achraf Hakimi y por dos centrales correctores a su lado. Además, redondeó su gran partido en la Supercopa francesa contra el Nantes con un golazo de tacón, demostrando el olfato goleador del que ha hecho gala durante toda su carrera. Es solo el principio de la temporada, pero Galtier ha demostrado que con él, Ramos será importante, y si le respetan las lesiones, el de Camas no ha dicho su última palabra en el fútbol de más alto nivel.
¿De vuelta a La Roja?
De hecho, si prolonga su buen nivel durante los próximos meses, tampoco es una locura pensar que Luis Enrique, seleccionador español, le pueda incluir en la lista para jugar el Mundial de Qatar que se disputará entre noviembre y diciembre de este año. La experiencia y el liderazgo se dan por garantizados, y si futbolísticamente sigue siendo un activo más que útil para La Roja, no es nada descartable. Porque ahora, lo que falta en la selección española son centrales diestros. Como zurdos, Pau Torres parece tener el puesto garantizado, con Aymerick Laporte o Iñigo Martínez como recambios.
Pero por la derecha, el único que parece gozar de la confianza de Luis Enrique de forma incondicional es Eric Garcia. El asturiano también suele contar con Diego Llorente, del Leeds, pero ni uno ni otro cuentan con demasiada experiencia internacional, y Ramos podría aprovecharlo para colarse en el equipo y aumentar así su leyenda en la selección, donde es el futbolista con más interncionalidades, con 180.