El Sevilla tiene un problema más que evidente en la parcela defensiva, que explica los pobres resultados obtenidos hasta el momento. Contra el Girona quedaron reflejadas las carencias que existen en la retaguardia, y encajaron cinco goles, saliendo humillados de Montilivi a manos del actual líder de La Liga EA Sports. Ni siquiera el regreso de Sergio Ramos ha servido para poder tener una estabilidad en la defensa, y el rendimiento del veterano central ha estado por debajo de las expectativas.
Aunque en su última temporada en el Paris Saint-Germain mostró un buen nivel, su segunda etapa en la entidad de Nervión no está teniendo el éxito esperado. No es el líder en el terreno de juego que querían, y ha cometido errores que nunca antes le habíamos visto en su carrera. Es injusto señalarle solo a él, cuando la gran mayoría de compañeros tampoco están al 100%, pero lo que no acaban de entender es por qué sigue jugando siempre como titular.
Porque como han filtrado muchos medios, en el vestuario existe un gran malestar por el trato de favor que los entrenadores han tenido con el campeón de un Mundial y de dos Eurocopas, guiándose más por la trayectoria y el caché que tiene, que por su aportación sobre el césped. Creen que no ha hecho méritos para ser indiscutible en la alineación, y que es uno de los principales responsables de algunos resultados tan desastrosos como el del pasado fin de semana.
Ramos ya no proporciona la seguridad de antes, y Artem Dovbyk lo retrató con un ‘hat trick’, siendo incapaz de frenar al ucraniano en todo momento. Quique Sánchez Flores ha intentado hacer todo lo posible para blindar la retaguardia, cambiando el sistema para jugar con tres centrales, pero de momento nada ha dado resultado. En el Ramón Sánchez Pizjuán no pueden estar contentos con el ex del Real Madrid, y es lógico que le exijan más.
Ahora mismo parece que Sergio juega siempre por la jerarquía y la experiencia que acumula, y no por los méritos que está haciendo.
¿Seguirá Ramos en el Sevilla más allá de junio?
La pregunta que se hace mucha gente es si Ramos seguirá en el Sevilla más allá del mes de junio, cuando finaliza su contrato actual. Porque cuesta creer que Víctor Orta le ofrezca la renovación en caso de que no mejore considerablemente sus prestaciones durante los siguientes meses.