El futuro de Sergio Ramos claramente no pasa por el Paris Saint-Germain. Pese a ser un fijo en los esquemas de Christophe Galtier y haber dejado atrás los constantes problemas de lesiones que le persiguieron durante la temporada pasada, no tiene opciones de firmar un nuevo contrato. Y es que creen que tampoco ha rendido a la altura de las expectativas, y no está justificando el elevado salario que percibe, de 12 millones de euros netos por curso.
Así que Nasser Al-Khelaïfi tiene decidido no ofrecerle un nuevo contrato, y permitirá que se marche en junio con la carta de libertad, dos años más tarde de su presentación. Tienen un sustituto apalabrado con Milan Skriniar, que también se incorporará a coste cero, después de que expire su vínculo con el Inter de Milán. De modo que al andaluz no le queda de otro remedio que comenzar a buscar un nuevo desafío.
Está a punto de cumplir los 37 años, aunque todavía no le pasa por la cabeza la posibilidad de colgar las botas. Se siente preparado para seguir jugando en la élite, y valorará detenidamente todas las propuestas que le puedan llegar, principalmente sin son de Europa. No obstante, por ahora el único interés que ha recibido el ex del Sevilla llega de destinos exóticos, como la Major League Soccer de Estados Unidos, o las ligas de Qatar y Arabia Saudí.
Pero en el Real Madrid todavía tiene las puertas abiertas. Aunque su salida fue dolorosa, y se marchó por la puerta de atrás, Florentino Pérez está dispuesto a perdonarle. Olvidará que se fue al Parque de los Príncipes únicamente por motivos económicos, y le ofrece un puesto de trabajo para formar parte de la directiva, o para integrarse en la fundación del club, además de ser embajador. Una oferta que Ramos ha rechazado.
Y es que, para ejercer esta función, primero tendría que retirarse. Evidentemente, por sus planes a largo plazo pasa la idea de volver al Santiago Bernabéu, pero aún no ha llegado ese momento.
Ramos desearía seguir en el PSG
Ramos apunta a convertirse en uno de los protagonistas del mercado estival, y a estar involucrado en muchas especulaciones. Pero ha dejado bien claras cuáles son sus prioridades, y en caso de poder decidir, lo que más le gustaría es poder seguir militando en las filas del PSG.
Una cosa que no depende de él, y que tendrá que decidir Al-Khelaïfi, que es partidario de perderlo de vista.