Todos esperaban que Sergio Ramos se retirara en el Real Madrid, y por esa razón impactó tanto el anuncio que Florentino Pérez hizo la temporada pasada. Cuando la gente esperaba que comunicara la ampliación de su contrato, apareció en público para confirmar la salida del capitán, debido a que no habían llegado a un acuerdo para renovar. Así que aprovechó que quedaba libre el 30 de junio para hacer las maletas, e iniciar una nueva aventura.

Su destino se encontró en el Paris Saint-Germain, que no dudó en acogerle en sus filas. Nasser Al-Khelaïfi no quería desaprovechar la oportunidad de llevarse a uno de los mejores defensas de la historia, y le pagó todo lo que pedía. No hizo caso a las advertencias, pues muchos ya auguraban que los mejores días del sevillano eran cosa del pasado. Además, ya había tenido serios problemas de lesiones durante sus últimos meses en La Liga Santander.

Nasser Al-Khelaïfi/ EFE

Al final, el resultado ha sido el que muchos se podían imaginar. El internacional español prácticamente no ha podido jugar ni ayudar a los de Mauricio Pochettino desde el terreno de juego, y ha estado casi toda la campaña en la grada. El pasado fin de semana pudo reaparecer, ante el Lorient, y disputar unos cuantos minutos, y fue abucheado por la afición. Las cosas le van realmente mal en Francia, y por eso se especula con su posible salida en el mercado estival.

Ni siquiera el regreso de Zinedine Zidane parece que vaya a servir de nada. En el Parque de los Príncipes están muy descontentos con Ramos, y tienen previsto ofrecerle la carta de libertad. El campeón de un Mundial y dos Eurocopas, por su parte, también parece estar preparando las maletas para abandonar Francia, donde ni él ni su familia se han sentido cómodos. Solo falta por conocer su próxima parada, e incluso se ha hablado de su retirada.

No hay día en el que Sergio no se arrepienta de abandonar el Santiago Bernabéu, pues echa mucho de menos su vida en la capital de España. Lástima que sus exigencias económicas y su postura inflexible le jugaran una mala pasada, y se acabó marchando por la puerta de atrás, y siendo considerado como un ‘traidor’ y un ‘mercenario’ por una parte de la grada.

El Madrid le ofrece regresar… pero como embajador

El ex del Sevilla no se lo pensaría dos veces en caso de que Florentino Pérez le llamara para regresar, y ponerse a las órdenes de Carlo Ancelotti. Sin embargo, eso es una cosa que no sucederá, pues el presidente da su etapa por concluida, y está muy satisfecho con Eder Militao y David Alaba.

Florentino Pérez/ Europa Press

Eso si, es consciente de la importancia que ha tenido Ramos en la historia reciente del Madrid, y por eso le abre las puertas, para ser embajador.