Un año después de su salida del Real Madrid, no se puede decir que haya sido algo positivo en la carrera de Sergio Ramos. Su primera temporada en París ha estado más marcada por las lesiones que por sus buenas actuaciones, y aunque a priori cumplirá su segundo y último año de contrato, el andaluz ya debe empezar a pensar a medio y largo plazo, cuando se retire. Cuando eso suceda, sabe que, aunque no acabó de la mejor manera con Florentino Pérez, tendrá abiertas las puertas del Santiago Bernabéu para volver en un rol más institucional.
Florentino Pérez quiere hacer las paces con las leyendas
Y es que uno de los mayores reproches a la gestión de Florentino en la presidencia del club blanco ha sido el poco tacto que generalmente ha dispensado a las leyendas madridistas, los verdaderos protagonistas de los éxitos del club. Dos de las más grandes de todas, Raúl González e Iker Casillas salieron por la puerta de atrás. Uno, acabó en el Schalke 04, donde siguió goleando en la Bundesliga y en la Champions League, mientras que el otro hizo las maletas y acabó en el Porto. Ahí, antes de que su corazón le diera un gran susto y una segunda oportunidad en la vida, seguía siendo un buen portero.
Además, ese mal trato con las leyendas tuvo su momento más delicado con la filtración de varios audios del presidente hablando con un tono muy despectivo sobre ellos, que puso su figura contra las cuerdas. Pero Florentino, aunque pudiera parecer muy tarde, ha sabido rectificar y acoger en el club a ambos. Raúl ha iniciado su andadura en los banquillos en La Fábrica y ha ido progresando hasta llegar a la dirección del Real Madrid Castilla.
En el caso de Casillas, tras recuperarse del infarto, volvió al Real Madrid en un rol más institucional, como embajador del club, y un papel parecido es el que Florentino Pérez tiene reservado para Sergio Ramos cuando cuelgue las botas. La vida del de Camas va a estar siempre ligada al Real Madrid, donde estuvo más de 15 años y jugó 671 partidos, y Florentino no quiere que el final tormentoso empañe una trayectoria idílica.
Sergio Ramos sabe que puede volver al Real Madrid
Ramos quería un contrato de dos temporadas para seguir, mientras que Florentino solo estaba dispuesto a ofrecerle una. Al final, la tensión fue en aumento y cuando el jugador decidió aceptar, se le comunicó que la oferta había caducado y tuvo que hacer las maletas para desembarcar en el PSG.
Aunque su futuro en París no está nada claro, parece que cumplirá el año que le queda, porque los franceses, aunque no cuentan con él como titular, no quieren pagarle todo lo restante del contrato para que se vaya gratis. Además, parece que en 2023, cuando presumiblemente se marchará de Francia, podría iniciar alguna aventura exótica en los Estados Unidos o, por contra, volver al Sevilla. En el Real Madrid no volverá a jugar, pero sabe que, cuando sea ya exfutbolista, el Santiago Bernabéu lo recibirá con los brazos abiertos como uno de los mejores embajadores que el madridismo puede tener.