Nadie tiene ninguna duda de que el futuro de Sergio Ramos no pasa por el Paris Saint-Germain. Su primera temporada está siendo un auténtico desastre, y las lesiones le están impidiendo poder ayudar al equipo sobre el terreno de juego. Nasser Al-Khelaïfi está harto de los constantes problemas físicos del andaluz, quien tampoco ha hecho ningún esfuerzo por adaptarse a la ciudad y al vestuario, y por ese motivo se está planteando muy seriamente la rescisión de su contrato.
A pesar de que tiene firmado hasta 2023, ha cobrado fuerza el hecho de que se vaya este verano, y pueden pagarle una indemnización para perderle de vista cuanto antes. Su primera experiencia lejos de La Liga Santander está siendo desastrosa, y el tiempo ha dado la razón a Florentino Pérez. Porque mucha gente se le echó encima, y le recriminó el hecho de que no hubiera renovado al capitán del Real Madrid, que era una leyenda de la institución, y el ídolo de la afición.
Sin embargo, el presidente no estaba dispuesto a aceptar las pretensiones económicas de René Ramos, el hermano y el agente de Sergio, y creía que lo mejor para el club era dejarle salir. Y es que su rendimiento estaba lejos de las expectativas, y ya había comenzado a experimentar un evidente declive deportivo. En su lugar, trajo a David Alaba, que ha mostrado un rendimiento sensacional, y apenas ha necesitado de un periodo de aclimatación.
Volviendo a Ramos, es el primero que está muy enfadado por como están yendo las cosas en el Parque de los Príncipes, y medita seriamente su salida. Tanto él como su mujer, Pilar Rubio, están seriamente disgustados, y dudan de que Francia fuera la mejor elección. Así que ya están haciendo las maletas, y esperan que el PSG comunique el despido del central de casi 36 años, para irse a otro sitio. El regreso a España está descartado, y sonaba con fuerza una aventura en Estados Unidos.
En la Major League Soccer, tenía una propuesta en firme del Inter de Miami, de su ex compañero David Beckham, y donde podría compartir vestuario con otro viejo amigo, como es Gonzalo ‘el Pipa’ Higuaín.
No obstante, su destino puede ser aún más exótico.
Ramos, muy cotizado en Japón
Porque Ramos es un futbolista muy conocido y cotizado en Japón, en especial, después de haber llegado a un acuerdo con la marca Mizuno, que es la que le proporciona las botas. Así que puede acabar su carrera allí, y el equipo que está más interesado es el Vissel Kobe.
Es decir, que se puede reencontrar con Andrés Iniesta, y con otro ex del Barça como Sergi Samper.
Fernando Torres o David Villa son otras leyendas que acabaron su carrera en el país nipón.