El nombre de Sergio Ramos ha estado en boca de todos en las últimas semanas. Se había instalado un conato de campaña mediática para que el andaluz fuera uno de los 26 convocados por Luis Enrique para ir al Mundial de Qatar con la selección española, y hasta que el seleccionador no hizo pública la lista y confirmó que, en un ejercicio de coherencia por lo que viene haciendo en los últimos tiempos, Ramos no iba a estar en Qatar, no se silenció todo.
Sergio Ramos ha renacido en su segunda y ¿última? temporada en el PSG
Lo cierto es que el exfutbolista del Real Madrid está jugando bien en su segunda temporada en París, después de un primer curso marcado principalmente por las lesiones, pero Luis Enrique hace tiempo que ha dejado de contar con él, y los centrales de La Roja van a ser Eric Garcia, Hugo Guillamón, Pau Torres y Aymeric Laporte. Una vez Ramos ya sabe que tiene casi imposible volver a defender los colores de la selección española, puede centrarse en su futuro.
Se encuentra en la última temporada de su contrato, que expira el próximo 30 de junio de 2023, y son muchos los rumores alrededor de cual será su siguiente paso. Pese a rendir bien bajo las órdenes de Chrostophe Galtier, puede que su futuro pase por salir de Francia y buscar algún destino más exótico y, probablemente, menos competitivo, para sus últimos años de carrera.
Ya hace tiempo que se abrió las puertas de Japón
Siempre se ha hablado de que podría irse rumbo a los Estados Unidos, y en la MLS seguro que habría varios clubes más que interesados. No obstante, probablemente no sea la única opción que baraje el de Camas. Si decide irse de Europa, podría no hacerlo para perseguir el sueño americano, y su destino podría estar en Asia, concretamente en Japón. Así se deduce por un giro que dio en su carrera hace ya unos meses, cuando rompió con su marca deportiva anterior para firmar con la firma Mizuno, de origen nipón.
Fue un primer paso para abrirse camino en el mercado asiático y ya sentó las bases para tomar el rumbo que inició ya hace algunos años Andrés Iniesta. Pese a ser una liga en crecimiento mediático, todavía cuesta que haya grandes jugadores que decidan acabar su carrera en Japón. Ramos todavía tiene tiempo para tomar esa decisión, y si sigue jugando así no es nada descartable que, pese a llegar al verano con 37 años, pueda tener propuestas del más alto nivel europeo. Muchas incógnitas que deberán resolverse durante la segunda parte de la temporada o quizá durante el Mundial, que él tendrá que ver desde su casa.