Cuando termine la actual temporada, el Atlético de Madrid deberá pagarle 40 millones al Barça por Antoine Griezmann. Esta cláusula, pactada por ambos clubes cuando acordaron la cesión del francés, solo quedará inválida si Griezmann no juega el 50% de los partidos para los que esté disponible, una situación que muy difícilmente no se cumplirá. Es por ello que el Barça intentó usarla para cerrar el fichaje de Álvaro Morata, pero el Atlético de Madrid, aludiendo a que todavía no se había cumplido, negó el traspaso del delantero cedido en la Juventus.
Llegado el verano, el Barça ya no querrá el fichaje de Morata, por lo que el Atlético de Madrid deberá abonar los 40 millones de euros y, si quiere incluir un jugador, este deberá ser Joao Félix. El portugués ya fue objetivo blaugrana el pasado verano, pero Diego Pablo Simeone se negó a dejarle salir, a pesar de volver a demostrar que no cuenta con el joven mediapunta portugués.
Xavi quiere a Joao Félix
Cuestionado sobre Joao Félix, Xavi Hernández se ha mostrado entusiasmado con la posibilidad de poder contar con el jugador, que aportaría muchísimo juego entre líneas, por lo que el Barça lo intentará. Si sigue Simeone, el Atlético de Madrid podría facilitar la salida del portugués, pues cada temporada que pasa va perdiendo valor, además de que el jugador está harto de ser siempre suplente. Otro tema es que Simeone se vaya, pues entonces la decisión será el futuro entrenador, que podría apostar por Joao Félix, frustrando las intenciones del Barça.
En el caso de que el portugués no entrara en la operación, el Barça no aceptará ningún otro jugador y exigirá al Atlético de Madrid le pago de los 40 millones, con los que se irá al mercado a cerrar algunas de las peticiones de Xavi Hernández, entre las que se encuentran Fabián Ruiz para el centro del campo y Jules Koundé para el eje defensivo, además de un lateral izquierdo y un lateral derecho.
Joao Félix, harto de Simeone
Fichado hace ya 3 temporadas del Benfica a cambio de 127 millones de euros, Joao Félix nunca ha tenido la confianza de Simeone, que le acusa de no esforzarse defensivamente. El entrenador argentino siempre exige a sus futbolistas un sacrificio cuando el equipo no tiene el balón, por lo que cualquier jugador que no cumpla acaba en el banquillo. Así le sucedió, por ejemplo, a Lemar, que tardó mucho en ganarse la confianza de Simeone.
Joao Félix, en cambio, ha combinado períodos de mayor esfuerzo con otros en los que se dejaba llevar al perder el balón, lo que ha acabado provocando que Simeone lo haya situado en el banquillo, dándole solamente minutos en los tramos finales de los partidos. Esta temporada, por ejemplo, Joao Félix solo ha sido titular en 6 partidos de la Liga y 3 de la Champions, una situación impropia de uno de los futbolistas jóvenes más prometedores del fútbol mundial. El jugador está harto y estaría encantado de fichar por el Barça.