El rendimiento de Joao Félix con la camiseta del Barça ha caído en picado. Después de un inicio como blaugrana espectacular, con 3 goles y una asistencia en sus dos primeros partidos como titular, el delantero portugués ha ido bajando sus prestaciones, y eso que Xavi Hernández ha seguido contando con él para el equipo titular. Joao Félix, sin embargo, parece una sombra del jugador que deslumbró contra el Betis y el Amberes y, lo que es peor, que las malas sensaciones están siendo refrendadas por sus números.

Desde que debutó con el Barça, Joao Félix acumula 10,7 pérdidas de balón por partido de Liga, una cifra que se incrementa hasta los 12,5 en la Champions League. A cambio, el portugués no contribuye en ataque, ya que se pasa largos tramos en los partidos sin prácticamente entrar en contacto con el balón, además de trabajar poco en las tareas defensivas.

Joao Félix, en un partido del Barça de esta temporada / Foto: EFE

Simeone acabó harto de Joao Félix

 "De Joao quiero que sea un jugador determinante. Que sea regular en el juego. Siendo diferente... Cuando conduce, cuando ataca... Que siempre van a golpearlo cuando tiene la pelota. Cuando logra girar y atacar, nos hace ser un equipo más vertical", afirmó en su día Simeone, que terminó harto de esperar a Joao Félix. Al argentino le cayeron críticas por no hacer jugar al portugués con el Atlético de Madrid, pero se mantuvo firme, al considerar que el jugador no aportaba lo que debía por su indudable calidad innata.

Por ello forzó su salida en el pasado mercado de invierno, como cedido al Chelsea, que al terminar la temporada decidió no quedárselo en propiedad. El Barça fue a por él, aprovechando la buena relación con Jorge Mendes, la presencia de Deco como sustituto de Mateu Alemany y el interés del club blaugrana en Joao Cancelo, otro jugador representado por el Superagente.

Xavi Hernández, durante el Clásico contra el Real Madrid / Foto: EFE

Joao Félix, un fichaje no prioritario para Xavi

Xavi Hernández era partidario de reforzar otras posiciones, especialmente la de pivote defensivo, pero tampoco iba a desestimar la llegada de un jugador de la calidad de Joao Félix, por lo que aceptó su fichaje. "Es un jugador importantísimo para nosotros. Necesitamos sus goles", afirmaba, mientras tanto, Simeone, que a pesar de ello estaba como loco por perder de vista al portugués.

Finalmente, Barça y Atlético de Madrid pactaron la cesión de Joao Félix, que teóricamente aceptaba cobrar solo 400.000 euros a cambio de jugar en el Barça. "Sí, la verdad que sí, que renuncié a una cantidad significativa de dinero de mi sueldo. Pero, bueno, necesitaba cambiar, necesitaba ir para un sitio en que pudiese practicar mi fútbol y como he dicho siempre creí que este sería el sitio ideal. Las cosas están saliendo bien y tenía que hacer ese esfuerzo para volver a tener alegría jugando", afirmó Joao Félix al respecto. Poco después, sin embargo, su salario pasó a ser de 4 millones de euros, una cifra muy inferior a lo que cobraba en el Atlético, aunque 10 veces superior a la inicial, clave para el Fair Play financiero.