El decepcionante Clásico de ayer para el Barça deja varias dudas en el equipo, pero también algunas conclusiones. Tras un gran primer tiempo en el que el equipo pudo abrir brecha en el marcador, con el paso por los vestuarios y la entrada de algunos cambios, el equipo se acabó cayendo. El principal señalado por la afición e incluso por la plantilla es Oriol Romeu.
El mediocentro catalán, que llegó este verano a cambio de 4,5 millones de euros, no está siendo capaz de suplir la baja de Sergio Busquets. En Porto, en lo que se podría considerar su primera gran cita europea, el de Ulldecona sufrió mucho en el medio campo. Desde que Frenkie de Jong está lesionado, el catalán tiene problemas para sostener a su equipo. Contra el Real Madrid, entrando en el minuto 72, su partido fue calamitoso.
Oriol Romeu, insuficiente
Tras varios encuentros en los que Romeu generaba dudas, ayer se acabaron de confirmar. Su entrada, en el lugar del joven Fermín López, acabó de hundir al equipo, que no estaba consiguiendo controlar el partido. En una de sus primeras acciones, el pivote mandó un balón a Araujo que casi se convierte en un regalo para Vinicius. Sus compañeros en defensa tuvieron que ir apagando los fuegos que iba generando el ex del Girona, superado totalmente por la calidad y el poderío físico de los de Carlo Ancelotti.
Su mala actuación tuvo su culmen en la jugada del segundo gol de Jude Bellingham. El inglés se coló a la espalda de Íñigo Martínez, que estaba pendiente de Luka Modric. Romeu, a pesar de ser consciente de la presencia del máximo goleador madridista, no persiguió a su marca. Una jugada similar a la que supuso el gol del Shakhtar en la Champions League, en la que el catalán fue totalmente superado en velocidad. Son ya demasiados los goles que le ha costado a su equipo el único fichaje por el que se ha pagado traspaso este verano.
A la espera de De Jong
Ante la cadena de malos partidos que ha acumulado el mediocentro, está por ver cuál será su papel en el futuro próximo del Barça. Su fichaje era claramente un parche a la salida de Busquets, a la espera de poder firmar un pivote de clase mundial. Pero el inicio de temporada del catalán invita a pensar que la dirección deportiva blaugrana buscará con más ahínco a alguien que pueda ser titular en una posición tan importante para Xavi.
De momento, los culés esperan con ganas el retorno de Frenkie de Jong. Tal vez la vuelta del neerlandés sirva para que los dos centrocampistas puedan compenetrarse como hicieron en los primeros partidos del curso. O puede que Romeu ya esté sentenciado y el técnico de Terrassa busque alternativas en el medio campo para no tener que alinearle.