La lesión de Karim Benzema contra el Celtic de Glasgow ha reabierto uno de los grandes debates del verano en clave madridista. Tras la salida de Jovic, la traición de Mbappé y el fichaje de Erling Haaland por el Manchester City, varias fueron las voces que apuntaron a que al Real Madrid le faltaba urgentemente el fichaje de un delantero centro. Sonaron nombres como los de Dzeko, Werner o Cavani, pero finalmente el club blanco decidió no fichar a nadie más.
Ahora, con la temporada recién empezada, la lesión de Benzema ha vuelto a abrir la caja de Pandora. Por suerte, todo apunta a que el delantero francés no sufre una lesión grave, como se temió en un primer momento, pero lo cierto es que el contratiempo puede ser leído como un aviso.
El plan B está en el Castilla
Sin opciones de acudir al mercado hasta el invierno, el plan A de Ancelotti es el de usar a Rodrygo, Asensio o Hazard, como ya explicó durante la pretemporada, aunque puede haber partidos en los que necesite un delantero más puro. Y es aquí donde surge el plan B, Iker Bravo, que este verano llegó al Real Madrid Castilla procedente del Bayer Leverkusen. El movimiento generó litros de tinta, pues en un primer momento parecía que Bravo ficharía por el Atlético de Madrid, pero cambio de idea ante la oferta del club blanco.
Ancelotti ya ha demostrado que es poco amigo de apostar por los jóvenes talentos del fútbol base del Real Madrid. Le cuesta jugársela, por lo que Iker Bravo lo puede tener difícil, pero ante la necesidad no se descarta que el técnico deba mirar hacia la cantera, y más si el delantero empieza con buen pie a las órdenes de Raúl González.
Formado en el Barça
Se da la circunstancia de que Iker Bravo lo tenía todo para triunfar en el Barça. Se formó en las categorías inferiores blaugrana y los técnicos lo tenían en muy buena consideración. Fue entonces cuando, de un día para otro, el delantero decidió no renovar su contrato y fichar por el Bayer Leverkusen. "Todo el mundo se sorprendió porque fue tres días antes de empezar la pretemporada con el Barça. Fue una decisión difícil, pero como el Barça está en un periodo de transición, de cambios, no era el momento de dar los pasos allí. Y decidí, por el proyecto deportivo y lo que me ofrecían, irme a Alemania. Está saliendo bastante bien. He estado 10 años en el Barça y nunca le voy a cerrar las puertas", explicó después Bravo en una entrevista al diario Marca.
El Alemania no le fue mal y llegó a ser el tercer jugador más joven de la historia en debutar en la Bundesliga, pero los problemas del filial del Bayer Leverkusen y el interés del Atlético de Madrid y del Real Madrid le han llevado a tomar la decisión de volver a España. Si Ancelotti lo considera oportuno, podría tener una oportunidad en el primer equipo blanco mucho antes de lo esperado.