Aurelien Tchouaméni y Brahim Díaz están realmente preocupados por la situación que espera a ambos en el Real Madrid. Ahora mismo tienen muy complicado ser titulares con Carlo Ancelotti, e incluso parece difícil que puedan disponer de continuidad y acumular minutos. Porque la competencia que existe en sus demarcaciones es realmente elevada, y Florentino Pérez todavía no da por cerrada la plantilla. Es decir, que pueden llegar más caras nuevas.
Comenzando por el caso del internacional francés, que es el más llamativo, debido a que fue presentado como fichaje estrella hace solamente un año. Pagaron más de 80 millones de euros al AS Mónaco, y en su primer curso en el Santiago Bernabéu, no ha tenido el impacto esperado. Ha sido suplente habitual, y ha tenido que aceptar vivir permanentemente a la sombra de Toni Kroos, de Luka Modric, de Fede Valverde y de su compatriota Eduardo Camavinga.
Y nada hace indicar que el panorama pueda mejorar para el ‘18’, en especial, después de la compra de Jude Bellingham desde el Borussia Dortmund. Precisamente, el astro inglés ha sido el detonante que ha provocado que el centrocampista de 23 años se esté planteando muy seriamente su futuro en la capital de España. Y tiene prevista una reunión con ‘Carletto’ para aclarar su situación. Si no le convencen, acabará haciendo las maletas.
Tampoco pintan mejor las cosas para Brahim, que después de tres campañas sensacionales en las filas del AC Milan, decidió regresar al Madrid con la intención de ganarse la confianza de Ancelotti y convertirse en una pieza importante. Florentino Pérez le prometió que así sería, pero poco a poco comienza a percatarse de que le han engañado. De lo contrario, cuesta entender los motivos que han llevado al presidente a cerrar a Arda Güler, la perla del Fenerbahce.
Si Díaz ya temía por su puesto, con la presentación de la joya turca lo hace aún más. Y lo peor para el malagueño todavía está por llegar.
Kylian Mbappé, una amenaza para Brahim
Porque en caso de que el Madrid consiga cerrar la incorporación de Kylian Mbappé, por el cual tienen previsto realizar una nueva ofensiva al Paris Saint-Germain, Brahim se quedaría sin espacio. De modo que quiere hacer lo mismo que Tchouaméni, y hablar con Ancelotti para que le explique cuál será su función esta temporada.
Si la intención es que no salga del banquillo, Díaz no tendrá inconvenientes en marcharse.