La mastodóntica inversión económica que el Chelsea llevó a cabo la temporada pasada sirvió para poco. El conjunto londinense ha completado un curso para olvidar, por lo que no queda más remedio que volver a intentarlo. El club blue ya ha cerrado el fichaje de Mauricio Pochettino para el banquillo y el argentino tiene libertad total para vender y fichar.
Y una de las posiciones que Pochettino considera impresdindible reforzar es el centro del campo, del que se han ido ya piezas importantes como las de Kanté y Kovacic, que se añaden a la de Jorginho, que en el mercado de invierno fichó por el Arsenal. El Chelsea, pues, está peinando el mercado en busca de un centrocampista y el nombre que Pochettino ha puesto encima de la mesa ha sido el de Aurilién Tchouaméni, que no ha terminado nada bien su primera temporada en el Real Madrid.
Tchouaméni no es intransferible
Tchouaméni llegó al Santiago Bernabéu como una estrella en potencia, a cambio de 80 millones de euros. El francés empezó siendo titular indiscutible como pivote, beneficiado por la salida de Casemiro y en un primer momento no desentonó. Poco a poco, sin embargo, Tchouaméni empezó a generar dudas, unos problemas de adaptación que fueron evidentes después del Mundial de Qatar. Finalmente, Carlo Ancelotti empezó a buscar variaciones, desde Toni Kroos a Eduardo Camavinga, lo que supuso una pérdida de minutos de Tchouaméni, y en el tramo decisivo de la temporada.
Acabado el curso, en el Real Madrid se plantean seriamente si hay que darle o no otra oportunidad a Tchouaméni, que siempre que habla en público no duda en recordar que él lo que quiere es jugar, que no quiere estar en el banquillo, un claro aviso para Carlo Ancelotti. Y es que el francés teme que la llegada de Bellingham todavía le perjudique más, y en un año en el que habrá Eurocopa.
El Chelsea ofrece 80 millones por Tchouaméni
En estas circunstancias ha aparecido el Chelsea, que está dispuesto a poner encima de la mesa los 80 millones de euros que el Real Madrid pagó por Tchouaméni. El club blanco recuperaría a inversión, un dinero que podría destinar a fichar el 9 que necesita Ancelotti, con Kylian Mbappé como principal deseado. El italiano, además pide un lateral izquierdo y otro derecho, mientras que tiene overbooking de jugadores para el centro del campo.
El Real Madrid, pues, tiene que decidir si apuesta o no en Tchouaméni y el francés debe meditar si merece la pena o no esperar un año más a ver si consigue demostrar que es el elegido para ocupar el pivote defensivo del Real Madrid. El Chelsea espera, aunque si no hay una resolución no dudará en cambiar de objetivo.