El Barça sigue insistiendo en la contratación de dos jugadores del Chelsea. Esos son Marcos Alonso y César Azpilicueta, que han sido una petición de Xavi Hernández, y que espera que aterricen en verano. El problema es que primero deberán de negociar con Todd Boehly, el nuevo propietario, que ha advertido que no quiere perder a ningún futbolista. Y es que hay que recordar que Antonio Rüdiger y Andreas Christensen ya han anunciado su salida.
De hecho, el danés tiene un acuerdo totalmente cerrado con Joan Laporta de cara a junio, momento en el que finaliza su contrato. Junto a él, el presidente espera conseguir la incorporación de los dos españoles, pero no lo tendrá sencillo. Thomas Tuchel considera a ambos fundamentales en sus esquemas, y pide que no estudien las propuestas que puedan llegar. Aunque se lo pensaría, en caso de que entren en un cambio de cromos.
Y es que el entrenador ‘blue’ tiene un serio interés por dos cracks azulgranas, y que podrían acabar en Londres. El primero sería Sergiño Dest, que no ha acabado de triunfar en el Camp Nou, y ha sido duramente criticado. Fue una petición de Ronald Koeman, y esperaban que se convirtiera en el dueño del carril diestro, pero nada más lejos de la realidad. En las dos campañas que ha estado ha sido incapaz de asentarse, y está en la rampa de salida.
Xavi le ha demostrado que no confía en absoluto en el ‘2’, y no se lo pensaría dos veces en caso de poder traer a ‘Azpi’, a cambio de los servicios del norteamericano. En Stamford Bridge, el ex del Ajax de Ámsterdam podría explotar mucho más sus virtudes, pues actuaría como carrilero, una posición en la que se siente más cómodo. Eso si, tendría muy complicado, por no decir imposible, ser titular, debido a la presencia de Reece James, uno de los mejores del planeta.
No es la única pieza que Tuchel exigiría, pues ha señalado otro crack del Barça, que también cree que podría desplegar todo su talento en la Premier League.
Frenkie de Jong, cortejado por el Chelsea
Porque el germano ha exigido a Laporta que, en caso de querer llevarse a Alonso y a Azpilicueta, debería de estudiar la marcha de Frenkie de Jong, y a un precio bastante razonable. En concreto, el Chelsea no está dispuesto a pagar más de 60 millones de euros por el centrocampista de 25 años.
El Barça deberá de valorar detenidamente si merece la pena o no. Aunque lo cierto es que tanto Dest como el internacional holandés no son intocables, y de hecho estaban en las quinielas para acabar marchándose.
Xavi tendrá la última palabra.