Ya ha iniciado la cuenta atrás para lo que muchos aficionados llevan un largo tiempo esperando, ver a Marc Márquez a lomos de una Ducati. Faltan cuatro grandes premios para que finalice la presente temporada (lo que conlleva ocho carreras, cuatro al esprint y cuatro largas), que pondrán el punto final a la exitosa - excepto en el último tramo - trayectoria del piloto catalán en manos de Honda. No se descarta un retorno del piloto de Cervera, en caso de que la marca del ala dorada consiga construir una moto lo suficientemente competitiva para luchar por el título, pero, por el momento, Marc ha dicho adiós.
Lo que ya es seguro es que, como decíamos, correrá con una Ducati, lo que a priori le deberá permitir estar entre los contendientes a ganar el mundial, una situación que es lo que ha hecho que el octocampeón del mundo haya decidido poner rumbo hacia una nueva aventura. Lo hará en Gresini Racing, equipo satélite de la factoría de Borgo Panigale, donde tendrá de compañero a su infatigable hermano Alex. Y es que a pesar de no ser la escudería oficial, está claro que empuñar la Desmosedici GP23, abre las puertas de par en par a un nuevo campeonato.
Márquez renuncia al dinero para volver a divertirse
Y es que la Ducati, ya sea oficial o 'desactualizada' ha ganado, prácticamente, todas las carreras de la temporada. A excepción de Austin, donde por sorpresa ganó Alex Rins, y Silverstone y Montmeló, donde ganó Aleix Espargaró, el resto han sido victorias italianas, lo cual ha hecho que se hayan llevado el mundial de constructores y se lleven el de pilotos (veremos si con Jorge Martín o con Pecco Bagnaia).
A diferencia de muchos, Marc, ahora, se ha movido por su sueño de volver a ser campeón del mundo, y no lo ha hecho por dinero. Es más, en su antiguo equipo, el catalán percibía una gran suma de dinero, siendo el piloto mejor pagado de la parrilla. Un estatus al que ha renunciado por el 'simple' hecho de tener una moto competitiva y volver a colocarse donde se merece, como el mejor piloto de la parrilla.
Para emprender su nueva aventura hacia Gresini, Marc ha tenido que hacer grandes esfuerzos. Primero, decir adiós a una relación muy fructífera de más de 11 años, y después a una gran suma de dinero. Y no es solo que Márquez haya dejado de ser el mejor pagado de la parrilla, es que va a correr gratis en el año que ha firmado con Gresini.
Marc Márquez correrá gratis en Gresini
Un movimiento lógico, pero que, por otra parte, no deja de sorprender. Y es que Márquez ha priorizado en todo momento el éxito deportivo a los ceros en su cuenta, porque, de hecho, ni siquiera ha pensado en sus emolumentos, en caso de seguir vinculado a la escuadra de Faenza.
En una entrevista en Moto.it, Paolo Ciabatti, director deportivo de Ducati Corse, ha dejado unas perlas. "Que un piloto como Marc Márquez decida correr gratis para un equipo satélite con tal de subirse a una Ducati es un motivo de orgullo. Hasta donde yo sé, es así, pero se lo tendrías que preguntar al equipo Gresini o bien al propio Marc si quiere decirlo", aseguró el mandamás.
"Prácticamente, va a correr gratis, seguramente el Gresini Racing no puede permitirse pagar a un piloto la cantidad de dinero a la que estaba acostumbrado Marc Márquez, así que sea cual sea la situación, estamos hablando de algo completamente diferente, donde el factor económico no fue lo que impulsó esta decisión. Desde este punto de vista, deberíamos estar orgullosos de que considere que Ducati es la mejor moto para volver a ser competitivo y divertirse", dijo orgulloso Paolo Ciabatti y poniendo en valor la actuación del piloto de Cervera.
Y es que, a diferencia de Valentino Rossi, que se movió por dinero, Marc lo ha hecho por amor al motociclismo y por su ambición de seguir conquistando títulos. Si Marc gana con Ducati dará una doble lección a il dottore, primero por lo ya comentado, y segundo porque será capaz de conquistar el mundial con la escudería italiana, algo que no consiguió Valentino.