Valentino Rossi, piloto del equipo Yamaha, mantiene su conflicto personal con Marc Márquez. Aunque la temporada pasada prácticamente no se vieron por los circuitos, confiesa que sigue en guerra por el incidente de carrera que tuvieron hace casi seis años.
El trato entre Rossi y Márquez se interrumpió abruptamente en el Gran Premio de Malasia del 2015, primero por las declaraciones que Valentino realizó en la conferencia de prensa previa al inicio del fin de semana del Gran Premio y, posteriormente, con los acontecimientos que se sucedieron durante la carrera y que acabaron con Marc Márquez por el suelo. El piloto italiano ha asegurado que lo que le hizo Márquez en el Mundial del 2015 "es imperdonable" y que cuándo piensa en las carreras de este año sigue teniendo "las mismas sensaciones" de frustración.
Márquez y Rossi durante una carrera del GP de Argentina / EFE
Una relación "imposible"
"Imposible (perdonar a Márquez). Lo que me ha hecho es imperdonable. Cuando vuelvo a pensar en esos días tengo las mismas sensaciones de ese momento. Y pasaron seis años. Me parece difícil que puedan cambiar mis sensaciones", ha afirmado Rossi con contundencia en una entrevista publicada en el diario italiano Corriere della Sera.
Desde aquel momento y a pesar de algún tímido intento del piloto de Cervera para arreglar la tensa situación, el campeón italiano siempre se ha negado a hacer las paces con él. Rossi, que disputará este año la vigésima temporada de su carrera en la categoría reina, en la que ha sido siete veces campeón del mundo, también se ha referido a la grave lesión que sufrió el año pasado Márquez, operado tres veces en el húmero derecho, y de la cual todavía se está recuperando.
Rossi quejándose a Márquez después de caer en una carrera del GP de Argentina / EFE
Márquez se quiso recuperar demasiado rápido
"Creo que (el error de Márquez) ha sido querer volver a correr demasiado pronto tras la operación y no he entendido bien por qué permitieron que eso pasara. El doctor Costa fue un pionero, revolucionó las maneras de recuperación, reduciendo los tiempos de inmovilidad, mostró un camino muy importante", ha añadido Rossi. "Con Márquez se saltaron todas las limitaciones, no se sabe por qué", ha dicho para echar más leña al fuego.
"Siento muchísimo que no pueda correr. Si se recuperará, algo que de momento no se sabe, regresará fuerte como antes. Pero Márquez no ha sido el rival más fuerte que he tenido", ha concluido.
A nivel personal, Rossi ha reconocido que a sus 42 años ha cambiado su manera de ver el motociclismo y que en los últimos tiempos está dedicando tiempo también a otros temas de la vida, como la política. No obstante, sigue concentrado en ser competitivo en la máxima cilindrada: "Corro porque pienso que puedo ganar el Mundial. No es una obsesión. Me alegraría hacerlo bien, subir al podio, ser protagonista, luchar".
Imagen principal: Marc Márquez ofreciendo las paces a Valentino Rossi / EFE