La mejora del Barça se tiene que ver sobre el césped, pero esta temporada parece que el conjunto blaugrana da más pasos hacia atrás que hacia adelante. Y estas dificultades que se están haciendo evidentes provocan malestar dentro de la entidad culé, cosa que el presidente Joan Laporta y el director deportivo Deco quieren resolver. Y por esto ya dan por hecho que venga el entrenador que venga algún futbolista se acabará marchando.

Irregularidad en el rendimiento de Iñigo Martínez

Hay que saber que el Barça ha invertido muchos millones para cambiar la cara de un equipo que no ha acabado de dar la respuesta esperada. Se han hecho muchos sacrificios y muchos esfuerzos económicos para poder tener a los jugadores que hay a estas alturas. Pero no todo el mundo está rindiendo como se esperaba. Y por eso hará falta ser resolutivos y cambiar la mentalidad.

Iñigo Martínez jugando con el Barça / Foto: EFE

Y una de las grandes decepciones ha sido Iñigo Martínez, que llegó para consolidarse en el eje de la defensa, pero ha acabado siendo secundario. Nuevamente afectado por las lesiones, ha visto cómo compañeros suyos le han pasado por delante. Era el central zurdo que tanto necesitaba el Barça, pero no ha tenido el efecto esperado.

El problema es que solo ha jugado 972 minutos repartidos en 16 partidos. Parece que ha estado muy disponible, pero el problema es que cuando ha jugado no ha acabado siendo aquel jugador diferencial. Sí que ha tenido buenos partidos, pero ha tenido más de malos o en el cual ha pasado desapercibido. Y este rendimiento tan irregular no se puede permitir en el Barça, un equipo que aspira a ganar todos los títulos.

Iñigo Martínez entrenando con el Barça / Foto: FC Barcelona

La competencia de Iñigo Martínez es mejor

Iñigo Martínez no puede ser un pilar fundamental de este Barça si le falta ritmo y no siempre está en buenas condiciones. Lo más positivo para el club blaugrana, y uno de los argumentos de la decisión de prescindir de él, es que la competencia lo está haciendo muy bien. Y el nombre propio en este sentido es el joven Pau Cubarsí, de solo 17 años y que se ha convertido en un defensa muy importante para el Barça. Si Cubarsí continúa con su progreso ascendente se puede convertir en titular indiscutible muy pronto.

Además, en los últimos partidos ya ha quedado muy claro que cuando ha jugado Cubarsí ha habido tranquilidad, mientras que cuando lo ha hecho Iñigo Martínez siempre han aparecido dificultades. El joven central catalán supera al vasco en muchos aspectos del juego. Y lo que se empieza a pensar dentro del vestuario del Barça, pero también a las altas esferas es que venga el entrenador que venga al Barça, Iñigo Martínez no tiene el sitio garantizado.