Max Verstappen ha acabado por imponerse a Charles Leclerc en el GP de Arabia Saudí de Fórmula 1 después de una larga batalla durante las últimas vueltas|bóvedas bajo la noche de Yeda. La disputa entre el piloto neerlandés y el monegasco ha sido toda una partida de ajedrez, en qué, con el espectáculo y la deportividad servida, se han podido ver acciones surrealistas como la siguiente, donde el de Red Bull y el de Ferrari se ponían a prueba para ver quién pasaba antes por la curva 13, para así, poder disfrutar del DRS durante la zona de activación siguiente.
Fernando Alonso, víctima del "misterio" de la vuelta 37
Corría la vuelta 37 cuando Fernando Alonso, de la misma manera que les pasaba en Valtteri Bottas y a Daniel Ricciardo misteriosamente durante el mismo giro, veía cómo su monoplaza perdía potencia y le obligaba a abandonar. Entonces, el asturiano rodaba el octavo clasificado y venía haciendo un buen papel, pero víctima de problemas mecánicos se va de vacío de Arabia Saudí.
Con todo, el motor que llevaba el Alpine del piloto español era uno recién estrenado después de que se detectara una fuga en el que utilizó en el GP de Baréin. Sin embargo, el equipo francés ha celebrado la sexta plaza del francés Esteban Ocon. Con Hamilton fuera de combate después de una jornada de sábado muy desafortunada, el ritmo de la carrera lo han marcado Verstappen y Leclerc, perseguidos por un Carlos Sainz que ha acabado subiendo al tercer peldaño del podio.
El Safety Car se ha interpuesto a todavía más espectáculo
Quien ha quedado fuera de la batalla por la victoria ha sido Sergio Pérez, que a pesar de haber conseguido la primera pole position de su vida en la Fórmula 1, se ha visto perjudicado por el accidente de Nicholas Latifi a la vuelta 16. En aquel momento, el mexicano acababa de hacer su parada en boxes, y cuando el Williams del canadiense se ha estrellado contra los muros, la bandera amarilla y el Virtual Safety Car han jugado una mala pasada al 'Checo' haciéndole perder la primera posición.
De añadida, un toque entre Lance Stroll y Alexander Albon a dos vueltas para el final, ha propiciado la bandera amarilla y ha eclipsado lo que podría haber sido un final de carrera épico, ya que Leclerc y Verstappen venían en plena batalla y las circunstancias de la carrera han perjudicado al piloto de Ferrari, que no ha podido decir su última palabra.