El Real Madrid estaba convencido de que la renovación de Vinícius Júnior sería fácil. El extremo brasileño, que se ha ganado el corazón del Santiago Bernabéu, cobra en estos momentos 3,5 millones de euros brutos, una cantidad muy inferior a lo que le tocaría por minutos e incidencia en el juego, por lo que Florentino Pérez decidió iniciar conversaciones para renovarle el contrato, que expira en el 2024, antes de que Vinícius siga creciendo y deba pagarle todavía más.
Y es que el plan de Florentino pasaba por poner encima de la mesa un salario cercano a los 7 millones de euros brutos, una cantidad que sigue siendo baja si se compara con lo que cobran la mayoría de estrellas del fútbol europeo, que en el caso de Vinícius es mucho, pues prácticamente se le estaría doblando el salario. La idea del Real Madrid era vender la renovación como un premio a su excelente temporada, con el consecuente aumento de su cláusula de rescisión, hasta los 1.000 millones de euros, para blindarlo definitivamente.
Vinícius, en una acción del Real Madrid-Osasuna de esta temporada / EFE
Vinícius quiere ser el líder del Real Madrid
Florentino Pérez, en cambio, no contaba con que Vinícius Júnior, asesora por sus representantes, haya decidido no pasar por el aro. El extremo teme que el fichaje de Mbappé, al que se le puede añadir Haaland o Vlahovic, le quiten protagonismo la próxima temporada, lo que pondría en riesgo su progresión y su participación en el Mundial de Qatar 2022. Vinícius quiere seguir en el Real Madrid, pero le ha hecho saber a Florentino Pérez que tiene ofertas, entre ellas una del París Saint-Germain, y que no firmará su renovación su el Real Madrid no apuesta claramente por él.
Vinícius quiere ser la estrella del Real Madrid, el líder, luchar por el Balón de Oro, y con los fichajes que el club blanco quiere hacer para su delantera ve que no lo será. En el club blanco nadie duda de que la firma de renovación se producirá, aunque cada vez ven más claro que no será un trámite como pensaban hace solo unas semanas.
Florentino Pérez, presidente del Real Madrid / Europa Press
Vinícius necesita sentirse importante
El gran mal que persiguió a Vinícius en sus primeros años en el Real Madrid fue la falta de confianza. Cuanto más fallaba ante las porterías rivales, más debate se generaba, una bola de nieve que a punto estuvo de terminar con su carrera en el Real Madrid. El punto culminante fue cuando Zidane decidió situarlo de extremo en Stamford Bridge, en la vuelta de las semifinales de la Champions League.
Porque ahora que Vinícius se siente importante, se siente el líder, no quiere volver al punto de partida. Si Mbappé llega al Real Madrid y Benzema sigue, perderá su posición en el extremo izquierdo. Y no solo eso, pues si se añade Haaland o Vlahovic, incluso puede perder su papel como extremo titular. El Real Madrid, pues, deberá tomar una decisión. Ya sabe que Vinícius no pasa por el aro.
Imagen principal: Vinícius Júnior, después de fallar un gol con el Real Madrid / Europa Press