El regreso de Ronald Araujo no ha podido ser más esperanzador para el FC Barcelona. Después de seis largos meses fuera de los terrenos de juego, el central uruguayo volvió a la acción completando los 90 minutos en el contundente triunfo por 0-4 frente al Barbastro en la Copa del Rey. Su actuación fue una muestra de autoridad y solvencia que, además de suponer un alivio para Hansi Flick, lanza un mensaje claro sobre su importancia para lo que queda de temporada.
La lesión que sufrió en los cuartos de final de la Copa América, frente a Brasil, le llevó al quirófano y lo apartó de la competición desde el pasado 7 de julio. Ahora, tras meses de recuperación, Araujo está listo para competir al más alto nivel y reclamar un lugar en el once titular. En su reaparición, ocupó la posición de central derecho junto a Iñigo Martínez y no solo ofreció solidez defensiva, sino que también se proyectó en ataque, asistiendo de cabeza a Eric Garcia en el primer gol del encuentro.
Este retorno pone en jaque a la zaga actual, especialmente a Pau Cubarsí e Iñigo Martínez, dos jugadores que han sido prácticamente intocables para Flick esta temporada. El técnico alemán ha confiado en ellos para sostener la defensa en un calendario exigente, pero la presencia de Araujo, con su liderazgo, experiencia y capacidad para marcar diferencias en ambas áreas, podría cambiar el panorama.
Además de ser una pieza clave en la defensa, Araujo volvió luciendo el brazalete de capitán, un reflejo de su peso en el vestuario. Con Marc-André ter Stegen aún recuperándose de su lesión, el uruguayo asumió el rol de líder en el campo, algo que Flick valora enormemente. Su regreso no solo mejora el nivel competitivo del equipo, sino que también permite dosificar mejor a jugadores como Jules Koundé, que ha acumulado demasiados minutos en lo que va de temporada.
Con Ronald Araujo de vuelta, Hansi Flick tendrá decisiones difíciles que tomar en la zaga, pero lo que está claro es que el uruguayo ha vuelto para ser un pilar en el esquema del Barça. Su actuación en Barbastro es solo el comienzo de lo que promete ser un impacto decisivo en el resto de la temporada.