El Real Madrid prácticamente tiene decidido su primer fichaje en el próximo mercado estival. Porque las destacadas actuaciones que ha tenido Brahim Díaz en su periplo por la Serie A no han pasado desapercibidas, y Florentino Pérez está convencido de que lo mejor que pueden hacer es recuperarlo. El presidente siempre ha creído en las cualidades y en el increíble potencial que tiene el internacional español, y ya lo demostró en su día.
Porque fue él quien pagó los 20 millones de euros que pedía el Manchester City por su contratación, a pesar de que podía llevárselo gratis si esperaba seis meses más, y que no tenía casi experiencia en la élite. Estaba convencido de que era una apuesta segura y que tenía todo lo necesario para llegar a convertirse en una de las estrellas del Santiago Bernabéu. Por desgracia, Zinedine Zidane nunca acabó de confiar en él, y no le dio minutos.
Por eso tomó la decisión de marcharse y aterrizar en el AC Milan mediante un préstamo. En la entidad ‘rossonera’, se ha convertido en una pieza indispensable, y fue uno de los culpables de que lograran conquistar el ‘Scudetto’ el curso anterior, después de 11 años sin lograrlo. A sus 23 años por fin se puede decir que ha dejado de ser una gran promesa y se ha convertido en una realidad, y ha hecho cambiar de opinión a Carlo Ancelotti.
Después de la salida de Isco Alarcón, en el Madrid se estudió la posibilidad de traer a Brahim para que ocupara su lugar, pero fue el técnico italiano quien no lo acababa de tener claro. Dudaba de su adaptación y de su valía, y por eso Florentino Pérez no hizo ningún esfuerzo para traerlo. Ahora, en cambio, ‘Carletto’ sí que está convencido de que sería un refuerzo muy interesante para la plantilla, y, sobre todo, si consideramos el precio que tendría.
Y es que únicamente deberían de pagar cinco millones de euros, que es la diferencia que hay entre la opción de compra que tienen en San Siro, y la cláusula de recompra que se guardó el cuadro blanco.
Brahim solo volvería si le prometen un papel importante
Aunque todavía será necesario convencer a Brahim, que nunca ha ocultado que se encuentra muy cómodo en Milán, pero que estaría encantado de jugar en el Madrid, que es su gran sueño. Eso sí, no lo hará para ser suplente habitual, y espera que le garanticen un papel importante.
De lo contrario, no tendría problemas en seguir en Italia, o estudiar alguna de las otras propuestas que tiene, pues no son pocos los admiradores que siguen sus pasos.