Dicen que quien no conoce su historia está condenada a repetirla. Y eso es lo que parece que le va a pasar al Barça, de nuevo, esta temporada. Joan Laporta heredó una plantilla con salarios muy por encima del valor de mercado de los futbolistas y con contratos crecientes al paso de las temporadas. Así pues, se vio obligado a intentar renegociar algunos sueldos para liberar masa salarial, y en algunos casos dar salida a varios de los jugadores que no entraban en los planes de Xavi Hernández.
Por aquel entonces, Gerard Piqué no contaba en exceso para el técnico egarense, y ante la negativa del central de la Bonanova de dejar el club, pasó a ser el cuarto central. De esa manera, ocupó un rol más que secundario, ante la irrupción de jugadores como Ronald Araujo, Andreas Christensen y Jules Koundé. Una situación a la que Piqué no estaba acostumbrado, por lo que, finalmente, decidió retirarse antes que marchar a cualquier otro equipo.
Jordi Alba, en la misma situación que Piqué
Ahora, como decíamos, se va a producir una situación similar con otra de las denominadas "vacas sagradas" en el FC Barcelona. Se trata de Jordi Alba. El lateral izquierdo blaugrana mantiene una gran relación personal con su entrenador, pero a nivel deportivo, la etapa del de Hospitalet en el Barça parece que ha llegado a su fin.
Como ocurriera con Piqué, la irrupción de nuevos futbolistas, en este caso de Alejandro Balde, ha dejado en jaque a Jordi Alba. Si bien podría aceptar el rol de suplente, lo cierto es que para el entrenador de Terrassa, Marcos Alonso sigue por delante del defensor catalán.
La intención de la entidad catalana es desprenderse del futbolista, que tiene uno de los sueldos más altos de la plantilla. Su salida podría permitir la llegada de varios de los fichajes, pero el lateral de Hospitalet tiene otros planes. Y es que, a pesar de los problemas económicos de su club, quiere quedarse hasta terminar su contrato.
Xavi Hernández no cuenta con Jordi Alba
Como ya sucediera con Piqué, Xavi tiene previsto mantener una charla con su jugador para explicarle sus planes. Una conversación en la que le transmitirá que su protagonismo no va a aumentar, más bien todo lo contrario, la importancia de Alba irá a menos con el paso del tiempo.
En el caso de Piqué, a mitad de temporada, se dio cuenta de que aquello no era para él y decidió colgar las botas. No hay previsión de que el lateral izquierdo se retire, pero se espera algún gesto por parte de Jordi Alba para llegar a un acuerdo con Joan Laporta y la directiva blaugrana para rescindir su contrato o, si más no, bajarse el sueldo.