Joan Laporta y Xavi Hernández siguen hablando sobre la posible llegada del técnico de Terrassa al banquillo del Barça. Tras el momento de tensión vivido la semana pasada con el anuncio de que Ronald Koeman seguiría en el banquillo blaugrana fuera el que fuera el resultado del Atlético de Madrid-Barça, ambas partes han recuperado la concordia, conscientes de que tarde o temprano Xavi tendrá que asumir la dirección del equipo.
Y en las conversaciones entre Laporta y Xavi, ya sea de forma directa o a través de personas de sus entornos respectivos, se ha hablado tanto de la temporada actual como del futuro, pues la dirección deportiva del Barça está trabajando sin descanso en la plantilla de la próxima temporada. El equipo debe ser reforzado con poco dinero, un trabajo monumental que requiere la precisión de un cirujano.
Ronald Koeman, entrenador del Barça / EFE
Cinco fichajes...
Si una cosa tiene clara Xavi Hernández es que quiere que el Barça recupere sus esencias, el 4-3-3 y el fútbol de posición con el balón y el fútbol ofensivo como principales argumentos. Y para ello necesita un determinado perfil de futbolistas. Por un lado, Xavi quiere un centrocampista creativo que se una a De Jong, Nico González, Gavi y Pedri. El entrenador es consciente de que en estos momentos no puede exigir nombres concretos, sino perfiles, por lo que la idea es que la dirección deportiva proponga nombres de los cuales Xavi acabará decidiendo.
Xavi Hernández, además, necesita dos laterales, uno más versátil, tipo Alaba, y otro de largo recorrido, tipo Jordi Alba o Dani Alves. Y en la zona ofensiva, el técnico necesita un extremo con desborde, una posición para la que el Barça lleva semanas trabajando en el fichaje de Antony, del Ajax, y un delantero centro. Aquí es donde Laporta quiere sí o sí a Erling Haaland, pues debe ser el futbolista que promocione la marca Barça por el mundo. Xavi ha dado su ok.
Joan Laporta, presidente del Barça / EFE
...y una sorpresa
Un punto que ha sorprendido de Xavi, y que ha sido bien visto en el Barça, es que el entrenador ha hecho saber que no exigirá la continuidad de ningún futbolista, siempre y cuando su salida sea para hacer frente a la crisis económica que atraviesa el club.
Xavi, pues, vería con buenos ojos la salida de alguno de los veteranos del vestuario, alguno de ellos amigos suyos, y que tienen unas fichas muy elevadas. Son los casos de Jordi Alba, Piqué, Sergi Roberto y Sergio Busquets, cuatro jugadores que serán prescindibles. También hay luz verde para la salida de Dembélé, un jugador maravillosamente anárquico, pero que no encaja en un fútbol de posición que requiere un funcionamiento coral.
Imagen principal: Xavi Hernández, entrenador del Al Sadd / @BancoSantander