Encontrar a un sustituto para Jordi Alba es una asignatura pendiente en el Barça. No pueden seguir aplazando la búsqueda de un lateral izquierdo, y es un asunto prioritario. A pesar de que el ‘18’ siga rindiendo a un buen nivel, no se puede olvidar que ya tiene 33 años, y por lo tanto su retirada está cada vez más cerca. De hecho, en las últimas temporadas también ha comenzado a experimentar problemas con las lesiones, y en algunos momentos su rendimiento no ha sido del todo bueno. Xavi Hernández es el primero que pide una nueva cara.
El problema es que el nombre que propone, Alejandro Grimaldo, no parece ser una opción demasiado viable. Han preguntado precio al Benfica, y se esperaba que le dejaran salir por una cantidad razonable, teniendo en cuenta que acaba contrato en 12 meses. Sin embargo, la respuesta ha dejado a todos atónitos, pues no se conformarán con menos de 35 millones de euros, una cifra a la que Joan Laporta ni quiere ni puede llegar.
Por esa razón, ha tomado la decisión de comenzar a estudiar otras alternativas que sean más accesibles desde el punto de vista económico. Y aquí es donde ha aparecido el nombre de Marcos Alonso, que se ha ofrecido personalmente, a través de su representante, para hacer saber que estaría encantado de poder probar suerte en el Camp Nou. Da su etapa en el Chelsea por concluida, y desea marcharse después de varias campañas allí.
No pretende alargar más su aventura en la Premier League, y tiene claro que desea regresar a su país natal, el cual abandonó hace más de una década. También queda libre en 2023, y ha advertido a su entrenador, Thomas Tuchel, y al nuevo propietario, Todd Boehly, que no se sentará a negociar para extender ese documento de trabajo, y que espera que le pongan todas las facilidades posibles para cambiar de aires. Es decir, que pidan un precio bajo.
A Laporta es una operación que le convence bastante, pues la experiencia que tiene el internacional español a sus espaldas es muy importante, y sigue rindiendo al máximo nivel. No parece importarle en absoluto el hecho de que se haya criado en las categorías inferiores del Real Madrid, el eterno rival, y con el que llegó a debutar en el primer equipo.
Xavi prefiere a un futbolista más joven
El problema que ve Xavi en el fichaje de Alonso es el hecho de que ya tenga 31 años. Obviamente, no niega las grandes cualidades que tiene el ex del Sunderland, la Fiorentina o el Bolton Wanderers, pero cree que es mejor traer a alguien más joven, y que pueda ser el sucesor de Jordi Alba.
La estrella ‘blue’ solamente sería un recambio, y no le quedan muchos más años por delante.
El problema es que es una de las pocas opciones que el Barça se puede permitir económicamente.