"Será un partido trampa". Así define Xavi Hernández la llegada de la Champions League al Spotify Camp Nou con la visita del Viktoria Pilsen. Teóricamente, el conjunto checo es la cenicienta del grupo, pero el técnico de Terrassa considera que el partido de este miércoles será una "guerra" ante un equipo "muy físico, competitivo, muy peligroso a balón parado y que sabe jugar al contragolpe".
Xavi Hernández: "Habrá rotaciones"
El Barça es el gran favorito para llevarse los tres puntos en la primera jornada de la máxima competición europea. El grupo de la muerte proporciona a los blaugrana la primera toma de contacto con la Champions contra, el a priori, equipo más débil de la liguilla. No obstante, el entrenador culé ha adelantado que "habrá rotaciones".
En este sentido, Xavi se ha remitido a "la acumulación de fatiga" del vestuario y ha hecho referencia a la exigencia del calendario de la temporada. De añadida, y al ser preguntado por uno de los hasta ahora suplentes fijos, Ansu Fati, ha revelado que "está preparado para jugar, anímicamente fuerte y esperamos que empiece a jugar más asiduamente".
Xavi: "No concibo competir sin ganar"
En can Barça hay ilusiones renovadas con la Champions League. Después de que el equipo hubiera sido relegado a la Europa League durante la pasada temporada sin siquiera llegar a jugar las rondas eliminatorias de Champions, Xavi Hernández ha recalcado que "hay que ser humildes y cautos", pero sin duda, el objetivo es luchar "por todos los títulos".
Sin embargo, ha hecho referencia que por lo primero que luchará el equipo es por los primeros "tres puntos". "Desde 2015, el Barça no gana una Champions", por lo que tendríamos que alcanzar, "como mínimo, los octavos de final. Tenemos una plantilla muy competitiva y muy completa, pero lo tenemos que demostrar tal como lo hicimos ante el Sevilla. Quiero ganarlo todo, me gusta ganar, no concibo competir sin ganar".
El mensaje del egarense es claro. El nuevo Barça tiene un caché muy elevado, pero necesita ir paso a paso para empezar a desprenderse del miedo a Europa. Los antecedentes son nefastos y los jugadores lo saben mejor que nadie, pero han cambiado muchas cosas en Barcelona. Xavi lo tiene claro: "Si no puedo soñar con la Champions League, me quedo en casa".